Menos de 24 horas después de los buenos resultados logrados por la coalición de izquierda Nueva Unión Popular Ecologista y Social (Nupes) en la segunda vuelta de las legislativas en Francia, los socialistas, los comunistas y los ecologistas rechazaron la propuesta de la cabeza visible de la coalición y líder de la Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, de formar un grupo parlamentario común en la Asamblea Nacional.
La coalición logró 131 escaños, por lo que Mélenchon propuso formar un grupo parlamentario unificado y evitar así que el partido ultraderechista Agrupación Nacional sea el primer partido de la oposición con sus 89 escaños.
"En cuanto haya un solo grupo, la oposición se llamará Nupes", dijo Mélenchon. "Creo que debemos ser y seguir siendo una alternativa unida", argumentó.
La reacción de los demás partidos políticos no se hizo esperar con un claro "no". "La izquierda es plural. Está representada en su diversidad en la Asamblea Nacional. Es una fuerza al servicio del pueblo francés. Querer eliminar esta diversidad es un error. Me opongo", dijo la portavoz saliente del Partido Socialista en la Asamblea, Valérie Rabault.
"Una interparlamentaria, sí, para llevar nuestras luchas comunes. No estamos a favor de un solo grupo porque tenemos diferencias",explicó un dirigente del Partido Comunista de Francia (PCF) en declaraciones a la cadena BFMT.
Desde Europa Ecología-Los Verdes (EELV), Alain Coulombel recordaron que "no es lo que se acordó en el pacto". "Nunca se trató de que estuviéramos en un solo grupo. Es una iniciativa de La Francia Insumisa y no estamos a favor", ha dicho.
Entre tanto, el reelecto presidente Emmanuel Macron debe buscar aliados para sacar adelante su programa reformista y liberal, después de que su alianza de centro perdiera la mayoría absoluta en Francia, aunque manteniéndose como la fuerza política más votada, frustrando el sueño de Mélenchon de convertirse en primer ministro.
Su alianza ¡Juntos! obtuvo 245 de los 577 escaños de la Asamblea (cámara baja); el frente de izquierdas, 137; y la ultraderechista Agrupación Nacional (RN) de Marine Le Pen, 89, multiplicando por once los diputados logrados en 2017.
A 44 escaños de la mayoría absoluta (289), la portavoz del gobierno, Olivia Grégoire aseguró que "se necesitará imaginación, audacia y apertura" para llegar acuerdos.
Así el Parlamento recupera protagonismo político y es, desde ahora, escenario de una profunda fragmentación política en un caso sin precedentes en la historia de la V República.
El presidente del partido Los Republicanos, Christian Jacob, descartó la posibilidad de pactar con “Juntos” para apuntalar mayoría parlamentaria. "No tiene sentido un pacto, ni una coalición, ni un acuerdo de ningún tipo", dijo a la salida del Consejo Estratégico de Los Republicanos por considerar que el partido está "en la oposición al Gobierno y a Emmanuel Macron", aunque admitió que hay voces en su partido que apuestan por llegar a acuerdos con La República En Marcha, el partido del presidente.
Sin embargo anticipó que Los Republicanos rechazarán la moción de censura anunciada por el partido La Francia Insumisa contra la primera ministra francesa, Élisabeth Borne, para el próximo 5 de julio.
"¿Qué es esa idea de caza al hombre o caza a la mujer. No tengo simpatía política por Élisabeth Borne, pero eso no quiere decir que me vaya a sumar a los insumisos, con quienes no siento nada en común", argumentó por su parte el secretario general de Los Republicanos, Aurélien Pradié.
Los diputados elegidos comenzarán su mandato oficialmente mañanas, antes de que comience la legislatura el próximo 28 de junio, fecha en la que elegirá al presidente de la cámara. Los políticos franceses tendrán una semana para decidir sus posturas de cara a la formación de posibles alianzas./