Primer ministro israelí presiona a la UE contra acuerdo nuclear iraní | El Nuevo Siglo
AFP
Lunes, 12 de Septiembre de 2022
Agence France Presse

El primer ministro israelí, Yair Lapid, viajó ayer a Berlín (Alemania) para intentar disuadir a las potencias occidentales de renovar el acuerdo sobre el programa nuclear de Irán, enemigo número uno del Estado de Israel.

La delegación israelí partió del aeropuerto Ben Gurion cerca de Tel Aviv, en horas de la tarde, y está previsto que Yair Lapid se entrevistará el día de hoy con el presidente alemán, Frank-Walter Steinmeier, la ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, y el jefe del gobierno, Olaf Scholz.

"La visita se centrará en cuestiones regionales y sobre todo en Irán. Para nosotros es importante seguir influyendo en la posición europea, principalmente cuando Alemania juega un papel muy importante", declaró a la AFP una fuente diplomática israelí. 

Israel está llevando a cabo una intensa campaña diplomática para evitar la reactivación del acuerdo de 2015 sobre el programa nuclear de Teherán, cerrado en aquel momento entre Irán, de un lado, y de Francia, Reino Unido, Rusia, China, Estados Unidos, Alemania y la Unión Europea, del otro. 

Y es que Tel Aviv considera que el acuerdo, actualmente en fase de renegociación, no frenará el programa iraní y propiciará el levantamiento de las sanciones económicas occidentales contra Teherán. Eso, de acuerdo con el Estado hebreo, permitiría a Irán financiar más generosamente a los enemigos de Israel, como el movimiento palestino Hamas o el libanés Hezbolá.

La declaración de las potencias europeas

No obstante este fin de semana Londres, París y Berlín consideraron que Irán "prosigue la escalada de su programa nuclear más allá de lo que, de manera plausible, sería justificable" en el marco de un programa nuclear meramente civil.

En efecto, los gobiernos de Francia, Reino Unido y Alemania manifestaron una "firme posición" expresada el sábado sobre las actuales negociaciones con Irán para retomar el acuerdo nuclear de 2015, lo que el primer ministro israelí agradeció.



Las potencias europeas que contribuyeron en su día a firmar dicho acuerdo tienen ahora "serias dudas" sobre el deseo de Irán de llegar realmente a un nuevo acuerdo, y reconocieron que están "al límite" en cuanto a la "flexibilidad", en un aparente ultimátum que no ha gustado en Teherán pero sí a Israel. 

De hecho, el primer ministro Lapid afirmó que Israel ha presentado informes que supuestamente acreditan sus recelos en un diálogo "tranquilo e intenso" con británicos, alemanes y franceses. "No se ha acabado todavía", indicó, anticipando un "largo camino por delante" en el que ahora ve "señales alentadoras", según el periódico 'Times of Israel'.

Vale referir que Irán ha repetido constantemente que su programa nuclear no tiene objetivos militares, sólo civiles, y tachó de "no constructiva" la declaración de las tres potencias europeas.

La reacción iraní

Ante las declaraciones europeas, el mismo sábado Irán reaccionó calificando de "nada constructiva" la declaración de Reino Unido, Francia y Alemania que expresó "dudas" sobre el compromiso de la República Islámica de llegar a un "resultado positivo" en las negociaciones para salvar el acuerdo de 2015 sobre el tema nuclear.

"Es sorprendente y lamentable que, cuando siguen los contactos diplomáticos y los intercambios de mensajes entre las partes negociadoras", los tres países europeos publiquen una declaración "nada constructiva", indicó el portavoz del ministerio iraní de Relaciones Exteriores, Naser Kanani.

Adicionalmente,  este país condenó firmemente la decisión de Estados Unidos de imponer nuevas sanciones contra su Ministerio de Inteligencia, al que Washington acusa de haber cometido un ciberataque masivo contra Albania.

Albania, aliado de Estados Unidos en la OTAN, rompió sus relaciones con Irán el 7 de septiembre, al acusar a Teherán de varios ciberataques que intentaron destruir infraestructuras digitales de su gobierno el pasado julio, en vano, según Tirana.

Por esta razón Estados Unidos anunció una tanda de sanciones que afectan especialmente al Ministerio iraní de Inteligencia y a su ministro, Esmail Khatib, a los que acusa de supervisar varias redes de ciberespionaje y de pirateo en el mundo.

"El apoyo inmediato de Estados Unidos a la falsa acusación del gobierno albano muestra que quien urdió este escenario no es Albania, sino el gobierno estadounidense", indicó el portavoz de ese ministerio, Nasser Kanani, en un comunicado.