La Procuraduría General de la Nación lanzó una alerta por la insuficiente operación de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales –PTAR de la ciudad de Tunja, situación que estaría generando un alto grado de contaminación en el Río Jordán, fuente hídrica que atraviesa de sur a norte la ciudad, afectando también el Embalse La Playa, cuerpo de agua construido en el municipio de Tuta, Boyacá.
De acuerdo con el informe generado por el Ministerio Público, luego de una visita técnica preventiva, se evidenció que la PTAR funciona parcialmente con 2 de sus 3 módulos construidos, el primero sin operar por presuntos problemas legales. Esta situación ha ocasionado que el sistema no alcance a tratar la totalidad de las aguas residuales generadas por el municipio de Tunja que son 400 litros/seg, ya que actualmente vierte al río Jordán, alrededor de 240 litros/seg., de aguas sin tratamiento.
La Procuraduría advirtió que la situación del embalse de La Playa también es preocupante, presentando un alto grado de contaminación debido a los aportes de las aguas residuales domésticas de por lo menos el 60% del municipio de Tunja. El ente de control recordó que el embalse de La Playa fue construido con la finalidad de regular las aguas provenientes del río Jordán, controlando las crecientes en invierno y regulando su flujo de aguas en verano, en beneficio de los agricultores que dependen del distrito de riego.
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El informe también advirtió que, el embalse se convirtió en un acumulador de materia orgánica, de vertimiento industrial, basura y sedimento proveniente desde el nacimiento del río Jordán, ya que por su diseño y construcción recoge las aguas residuales que la PTAR no alcanza a tratar. Esta contaminación se convirtió en el alimento de un buchón de agua, por los nutrientes de la excesiva carga de materia orgánica acumulada “La biomasa del buchón, capaz de duplicarse en un mes, forma densas colonias flotadoras, densas alfombras impenetrables y además otro problema de tipo socio-ambiental, siendo hospedero de larvas de mosquito y zancudo, ocasionando problemas ecológicos y posibles afectaciones a la salud”.
Ante esta situación, la Procuraduría remitió el informe a la Fiscalía General de la Nación, a la dirección especializada contra violaciones a los derechos humanos, al Contralor General de la República, al Gobernador Departamento de Boyacá, al Alcalde Municipal de Tunja y al Director de la Corporación Autónoma Regional de Boyacá – CORPOBOYACA, para el seguimiento, revisión e implementación de acciones encaminadas a dar una solución definitiva de manera pronta y efectiva, para que se garantice el derecho a gozar de un ambiente sano y a la salud de los habitantes aledaños.