El gerente del Banco de la República, Leonardo Villar, expresó su preocupación sobre el posible impacto que tendría un aumento excesivo del salario mínimo en 2025 sobre la inflación del país.
Durante su intervención en un debate de control político en la Comisión Tercera del Senado, Villar destacó que un incremento muy fuerte podría poner en peligro la meta de inflación, que se espera que cierre el 2024 ligeramente por encima del 5%.
Villar explicó que "un aumento nominal muy inferior al del año pasado, como el que se busca este año, sería compatible con la situación social de los trabajadores, similar a lo que se logró en 2023", destacando que el aumento del salario mínimo en 2023 fue significativo, con un aumento del 12%, cuando la inflación ya mostraba una tendencia a la baja.
En cuanto a las expectativas inflacionarias para el próximo año, el gerente del Emisor prevé que el costo de vida de 2025 podría llegar a un 3%, siempre y cuando no se presenten factores imprevistos que alteren esta trayectoria.
"Este año vamos a tener una inflación ligeramente por encima de 5% y una expectativa del orden de 3%", comentó, resaltando que si se dan incrementos desmedidos en el salario mínimo, "podría poner en riesgo la meta de inflación".
En cuanto a la política monetaria, Villar reiteró la necesidad de mantener la prudencia en la reducción de las tasas de interés, señalando que una baja acelerada podría poner en peligro la estabilidad económica del país.
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— EL NUEVO SIGLO (@ElNuevoSiglo) November 20, 2024
También mencionó que bajar aceleradamente la tasa de interés sería muy peligroso para la economía colombiana", advirtiendo que "sería lamentable" que se presentaran casos como en Brasil, donde el banco central tuvo que elevar la tasa nuevamente debido a una política de recortes excesivos.
El aumento del salario mínimo y las perspectivas económicas
Con la discusión ya en marcha sobre el incremento del salario mínimo para 2025, que tendrá lugar este diciembre, Villar comentó sobre las primeras propuestas que se han presentado.
El Gobierno y los empresarios se han mostrado más inclinados a un aumento de entre el 5% y el 6%, mientras que las centrales obreras, a través de Fabio Arias de la CUT, han solicitado un incremento de dos dígitos.
Para Villar, un aumento desmesurado podría afectar negativamente la meta del costo de vida, sobre todo en un contexto del costo de vida y tasa de cambio volátiles. "El año pasado, los trabajadores tuvieron un aumento del 12% en un momento en el que la inflación ya mostraba una senda reduccionista", recordó, haciendo énfasis en que ese aumento fue "significativo y debe valorarse".
Además, señaló que los arrendamientos, que están indexados a la inflación, ya podrían estar representando un mayor gasto para los hogares, por lo que un aumento desmedido del salario mínimo podría exacerbar aún más la presión sobre el costo de vida.
Riesgos para la economía colombiana
El gerente del Banco de la República no solo alertó sobre los peligros de un aumento exagerado del salario mínimo, sino también sobre el contexto fiscal complejo del país. En su intervención, recordó la pérdida del grado de inversión que sufrió Colombia, lo que elevó el costo de la deuda y aumentó el riesgo país. Además, advirtió sobre los riesgos que presenta una reforma al Sistema General de Participaciones (SGP), que podría aumentar el déficit fiscal y la deuda pública, afectando la capacidad del país para cumplir con la regla fiscal.