Secretaría de Desarrollo Económico determinará las zonas en las que se implementará la ciudad 24 horas

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Después de varias iniciativas radicadas para debatir, este martes la plenaria del Concejo de Bogotá aprobó por mayorías el proyecto de acuerdo que permitirá a la administración fomentar la actividad comercial, cultural, de prestación de servicios gubernamentales y sociales en jornada nocturna mediante la estrategia Bogotá productiva las 24 horas.

La iniciativa busca fomentar el desarrollo socioeconómico a través de la estrategia y donde la Secretaría Distrital de Desarrollo Económico determinará, después de realizar un diagnóstico, las zonas de la ciudad en las que se implementará la ciudad 24 horas; de tal manera que se logre aumentar la productividad, competitividad y oportunidades laborales.

La concejal Gloria Díaz del Partido Conservador, autora del Proyecto de Gerente Nocturno dijo “me complace la aprobación de este Proyecto, ya que una ciudad 24 horas es la oportunidad de brindarle a quienes quieren vivir la ciudad en la noche una estructura de gestión más formal que respalde sus actividades, promueva su seguridad y garantice la creación y mantenimiento de sus industrias”.

Según Eduardo Beherentz, Vicerrector de la Universidad de los Andes y experto en sostenibilidad y urbanismo, la industria nocturna en Colombia mueve 3 billones de pesos al año, 988.000.000USD y en Bogotá genera 34.000 empleos directos por semana y 30.000 el fin de semana.

Este tipo de experiencias ya se han adelantado en otras ciudades del mundo con resultados bastantes positivos, no solo en la economía sino culturalmente. Según el BID, Amsterdam, es referente “mundial en materia de políticas nocturnas e innovación” donde los dueños de los locales han visto el aumento de sus ventas, mayor control de violencia, ruido, comercio ambulante, mejor uso del espacio público y generación de empleo”.

La Concejal considera que esta modalidad facilita la apropiación del entorno, la cohesión entre entidades y ciudadanos: “Esta figura del gerente en la noche, sería una herramienta conveniente para transformar la vida nocturna en nuestra ciudad, mejor apropiación del espacio público, ampliación de ofertas culturales, deportivas y artísticas”.

Según la Concejal Díaz, el gerente nocturno será un apoyo fundamental para el Alcalde Mayor en vigilancia y control  de la seguridad y convivencia de los ciudadanos.

Así mismo señala que una ciudad de 24 horas, impulsará no solo el desarrollo económico de Bogotá sino que producirá mejoras en movilidad y el  cuidado del medio ambiente al realizar, también, las actividades tanto de carga como descarga de mercancía en horas de la noche.

“Una ciudad es más interesante en la medida en que ofrezca las 24 horas del día museos, transporte, comercio, restaurantes y  escenarios para realizar actividades deportivas; Un turista que llega a Bogotá, para hacer negocios, gasta al día 1 millón 200 mil pesos; monto que indudablemente, puede incrementar en la medida que encuentre más actividades para realizar durante la noche”, afirma la Concejal Gloria Díaz, del Partido Conservador.

De acuerdo con el BID, la economía nocturna revitaliza “permite revitalizar zonas y edificios de la ciudad que a ciertas horas del día caen en desuso. Las ciudades nocturnas permiten promover la seguridad ciudadana. ¿Por qué? Porque, al menos desde el punto de vista perceptual, una calle llena de gente se percibe o se siente mucho más segura que una calle vacía. Por ello, las políticas que logran mantener a la gente en la calle por más tiempo, por ejemplo, la ampliación de los horarios nocturnos de establecimientos comerciales, de tiendas, de restaurantes y de cines, ayudan a mantener las calles llenas de vida”.

Al tiempo que el proyecto pasa a sanción del alcalde mayor de Bogotá, Enrique Peñalosa, para tener una ciudad que pueda ser llamada de 24 horas, se necesita ampliar la oferta de servicios en horario nocturno, en temas como el transporte público, la cultura, la recreación, la educación, el entretenimiento y el deporte; todo con el propósito de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos, especialmente de aquellos que ya, de hecho, realizan actividades nocturnas como trabajar o estudiar.