Otty Patiño, jefe negociador del Gobierno en las conversaciones con el ELN, expresó su descontento ante la sugerencia del Ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, sobre la posibilidad de buscar una financiación para el grupo guerrillero a cambio de dejar de cometer secuestros y otros crímenes.
La controversia surge tras la liberación de Luis Manuel Díaz, padre del futbolista 'Lucho' Díaz, quien estuvo en manos del grupo armado.
El jefe negociador calificó el comentario de Velasco como "desafortunado" y dejó claro que el Gobierno no está dispuesto a discutir temas de financiamiento como chantaje para evitar secuestros. Afirmó: "Eso es un comentario desafortunado, hay que decirlo, porque nosotros hemos dicho que no vamos a discutir ningún tema de financiación digamos como un tema de chantaje de no secuestro."
También enfatizó en que cualquier discusión sobre financiamiento debe estar vinculada al compromiso real del ELN para poner fin al conflicto. Advirtió que ni la comunidad internacional ni el Estado aceptarán un diálogo de este tipo si no hay una clara voluntad de poner fin a las hostilidades.
El hombre también señaló que el crimen de Luis Manuel Díaz pondrá a las víctimas de secuestro en un papel más determinante en las negociaciones. Confirmó que el ciclo de negociación en México continuará, y que el secuestro será uno de los temas clave en los próximos encuentros con el ELN.
Patiño reveló que el ELN se niega a considerar el secuestro como una violación al cese al fuego, lo cual complica las discusiones en el Mecanismo de Verificación. Afirmó que el grupo armado no reconoce el secuestro como un delito que viola el Derecho Internacional Humanitario (DIH).
Las declaraciones del jefe negociador fueron una respuesta directa a los comentarios del Ministro del Interior, Luis Fernando Velasco, quien planteó la necesidad de encontrar una solución para que el ELN deje de cometer actos ilegales y aseguró que la comunidad internacional sería clave en este proceso.
En medio de estas tensiones, el proceso de paz con el ELN enfrenta un nuevo desafío, destacando la importancia de abordar las diferencias con seriedad y buscar soluciones que promuevan la paz y la seguridad en Colombia.