Luego de una jornada de concertación en Fonseca, los habitantes de ese sector levantaron el paro que había iniciado hace cuatro días, anunció la ministra del Interior, Nancy Patricia Gutiérrez.

“Les hicimos ver que las vías de hecho no son buenas para nadie y les anunciamos que el 10 de julio estaremos aquí con los ministros para revisar todos los temas que afectan a las comunidades que viven en esta zona del país”, agregó.

Según la funcionaria, la reunión se concentrará en los temas de la vía que comunica al Cesar con La Guajira, los temas de salud, de medio ambiente, “de las comunidades indígenas y de las comunidades afro”.

La reunión se adelantó en la Universidad de La Guajira, ubicada en el municipio Fonseca, junto al subdirector de Invías, Óscar Cifuentes.

En la Mesa de Trabajo por La Guajira escucharon a la comunidad afectada por los bloqueos en las vías.

Entre las medidas adoptadas, a corto plazo, por parte del Gobierno, está el levantamiento del peaje para los vehículos livianos, que son categoría tipo 1, es decir, automóviles, camperos, camionetas y microbuses con ejes de llantas sencillas, los cuales representan el 80% de los vehículos que transitan por esta zona.

En la Mesa de Trabajo, la ministra Gutiérrez reiteró el compromiso del presidente Iván Duque con La Guajira y sostuvo que la instrucción del primer mandatario es que solo se deben adquirir compromisos que se puedan cumplir y hacer seguimiento a los mismos.

Cabe recordar que durante el primer día de protestas terminó en asonada contra la Alcaldía del municipio de Fonseca. En el transcurso de esa jornada se presentaron enfrentamientos entre los manifestantes y los miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad). Los uniformados, al parecer, entraron a dispersar a los manifestantes pues supuestamente no estaban dándole paso a las ambulancias. Las protestas terminaron con varias personas capturadas.

El acuerdo se dio ayer luego de que el gremio de los camioneros se sumara a la movilización protagonizando distintos bloqueos en la vía. En la manifestación al menos 11 de los 15 municipios del departamento se vieron incomunicados.

Ariel López, coordinador del paro, aseguró que la protesta podría afectar el suministro de gas para todo el país en caso de no haber acuerdo.

“Ya la gente está pensando: nos arreglan la problemática de La Guajira o hacemos que exista un problema a nivel nacional. Es decir, si no hay arreglo para las carreteras tampoco habrá gas para el país”, dijo López a Caracol Radio.

Los manifestantes estaban pensando bloquear los campos de Chuchupa y Ballena, que suministran cerca del 30 % del gas natural a Colombia.

Otro líder social, Fidel Pitre, justificó la protesta como necesaria pues en la zona se presenta desabastecimiento constante de combustibles.

Para Pitre, “necesitamos además políticas públicas en seguridad ciudadana y garantizar la vida de los líderes sociales. Por otro lado, rechazamos, de manera tajante el fracking y pedimos el desmonte del peaje en el municipio de San Juan del Cesar hasta que se arregle toda la vía del sur, en la cual muchas personas han perdido la vida”. Esta última solicitud fue escuchada por el Gobierno.

“Pedimos por el derecho a la educación superior, una red hospitalaria que salve vidas, el derecho a disponer de agua potable en nuestros hogares, para detener los arbitrarios cobros y recortes de energía de Electricaribe, entre otras cosas”, dijo.

Frente a esta última problemática, el presidente Iván Duque prometió ayer mismo en Cartagena una pronta solución.

“No solamente como Gobierno nacional decidimos hacernos cargo del pasivo pensional sino de empezar una transición para que se abra un proceso competitivo, con una diferenciación de mercados y ya hemos dado los pasos necesarios y esperamos que a finales del año tengamos ya definidos quiénes serán los operadores del servicio y le demos un oxígeno a la Costa Caribe colombiana que está esperando esta solución estructural a un problema de años”, dijo.

Duque expresó que el Gobierno nacional debe enfrentar los problemas que envejecieron y se dejaron pasar. “Ya en la comunidad existía desazón, quejas y problemas legales por el suministro de energía”, dijo.