UNA JUEZ de Justicia y Paz determinó concederle la libertad al exjefe paramilitar Salvatore Mancuso Gómez, al considerar que cumplió las dos terceras partes de la condena de 8 años de prisión que recibió por justicia transicional, cuando hizo parte del sometimiento de la mayoría de grupos de autodefensa. Si no se atraviesa alguno de los múltiples procesos que tiene abiertos en el país por distintos delitos, saldrá de la penitenciaría La Picota, en donde está recluido.

“Durante el periodo de libertad a prueba, el beneficiado se compromete a no reincidir en los delitos por los cuales fue condenado en el marco de la ley 975/2005, a presentarse periódicamente ante el Tribunal Superior del Distrito Judicial que corresponda y a informar cualquier cambio de residencia. La Sala competente del Tribunal Superior de Distrito Judicial deberá realizar un estricto seguimiento sobre el cumplimiento de la pena alternativa, las obligaciones impuestas en la sentencia y las relativas al periodo de prueba”, sostuvo la funcionaria de la rama judicial Luz Marina Zamora.

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Dentro de las limitaciones están que el 'expara' no podrá salir del país ni viajar a los departamentos de la Costa colombiana, territorios en los que habría delinquido.

Hoy se reanudó la segunda audiencia contra Mancuso, pues la primera fue programada para el pasado viernes a las 9 de la mañana y durante la jornada de este lunes se tomaron importantes decisiones.

Entre ellas, la unanimidad en que el 'expara' quedará en libertad, pues tras el dictamen de la juez Zamora, tanto la Fiscalía como víctimas estuvieron de acuerdo.

Se conoció que luego de que se cumpliera este periodo de prueba, el hombre quedará en libertad total siempre y cuando se cumpla con las restricciones impuestas en la medida.

Sobre su regresó a Colombia

Mancuso regresó el pasado 27 de febrero al país, tras pagar una condena de 15 años de prisión en Estados Unidos por cargos de narcotráfico, a donde fue extraditado por el gobierno de Álvaro Uribe, junto con otros exjefes paramilitares señalados de incumplir los compromisos adquiridos al someterse a la Ley de Justicia y Paz.

Cuando estaba todavía en Estados Unidos y tras varios intentos, la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) aceptó su sometimiento, pues se comprometió a resarcir a las víctimas entregando verdad sobre lo que sabe del conflicto armado de Colombia, en el que participó como uno de los principales cabecillas del paramilitarismo.

De antemano, Mancuso ha declarado primero en justicia y paz y luego de forma preliminar ante la JEP sobre presuntos vínculos en esa época de políticos e integrantes de la Fuerza Pública con los grupos paramilitares. Uno de los políticos que ha señalado es el expresidente Álvaro Uribe.

En agosto de 2023, el Gobierno nacional designó a Salvatore Mancuso Gómez como gestor de paz, con el propósito de que sirva de puente con los grupos armados de alto impacto en el propósito de su sometimiento a la justicia. En caso de que por otro proceso penal en su contra no recupere la libertad, se prevé que el Ejecutivo solicite que ello ocurra para que pueda desarrollar esta labor.

El expresidente Uribe dijo ayer que “de Mancuso nada me aterra, cuando pienso que se cambió de autodefensa por asesinato y desaforo de dinero”. Añadió que esta persona quiere “vengarse del enemigo que no pudo someter”.

El exmandatario también criticó la decisión del presidente Gustavo Petro de designar a Mancuso para dichas gestiones de paz, “para algunos conviene y para otros no. Las razones tienen más intención de amenaza política que de paz”, dijo Uribe.

Los 'pendientes' de Mancuso

Conocido con el alias de "El Mono", Mancuso tenía cuentas pendientes con la justicia de su país por cientos de desplazamientos, desapariciones y homicidios cometidos por las AUC, la asociación de escuadrones que enfrentaron a las guerrillas de izquierda. Sin embargo, podría quedar en libertad por decisión del presidente, Gustavo Petro.

El excomandante de las AUC también colabora desde el año pasado con la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), el tribunal encargado de los peores crímenes del conflicto colombiano, que también podría darle beneficios judiciales a cambio de su testimonio.

El presidente Gustavo Petro designó como "gestor de paz" a mediados de 2023, en medio de conversaciones que el ejecutivo adelanta con varios grupos armados, entre ellos herederos del paramilitarismo como el Clan del Golfo, también conocido como Autodefensas Gaitanistas de Colombia. El nombramiento implica su liberación, indicó en su momento el ministerio de Justicia. Sin embargo, Mancuso estará recluido en la cárcel La Picota, en Bogotá. 

Su defensa sostiene que Mancuso permanecerá bajo custodia policial hasta que se defina su situación jurídica, ya que corre un "riesgo extraordinario" en el sistema penitenciario de Colombia, actualmente bajo "estado de emergencia" por una oleada de ataques a guardias.