Décadas de reclutamiento infantil, utilización de las mujeres como botín de guerra, victimización de pueblos indígenas, uso de minas, desplazamientos y desapariciones forzadas, entre otros crímenes en Colombia, están plasmados en los 80 textos de estudio que el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) le entregó este jueves a la Jurisdicción Especial de Paz (JEP).
Los libros son producto de 10 años de trabajo sobre las dimensiones de la guerra, sus niveles de degradación e impacto sobre los colombianos.
“Miles y miles de colombianos confían en el CNMH y han encontrado en él la posibilidad de acceder a una verdad reparadora. Muchas gracias por compartirnos estos insumos”, afirmó Patricia Linares, presidenta de la JEP, durante el evento de entrega del material.
El CNMH resaltó que en los informes es central la voz de las víctimas y eso ha permitido que diversos actores involucrados directa e indirectamente en el conflicto armado sean puestos al descubierto.
“Los informes se han convertido en un insumo de la acción judicial. Esta es la apuesta que hacemos pública hoy (jueves): el trabajo conjunto entre la memoria y la justicia. Confiamos que serán un insumo para la verdad judicial de la que las víctimas son las principales destinatarias”, aseguró Gonzalo Sánchez Gómez, director general del CNMH.
Los informes permiten entender que la guerra no impactó a todos los colombianos de la misma manera. Por razones de género, etnia, raza, edad y discapacidad hubo personas que sufrieron más que otras. Los investigadores del CNMH han analizado cómo y por qué la guerra impactó a estas comunidades específicamente.
Las historias plasmadas en los informes no solo narran el horror de la guerra, también dan cuenta de la dignificación y la resistencia que presentaron los sobrevivientes.
En este momento el CNMH prepara informes sobre la zona fronteriza del Catatumbo, la región de los Montes de María, en el norte de Colombia, y el accionar de la guerrilla del ELN, entre otros. Estos estudios también pasarán a ser insumos de la JEP.