El Ejército reportó la desaparición de dos soldados regulares que se encontraban prestando servicio en la base militar de Larandia, en el departamento de Caquetá. Los uniformados identificados como Karen Salazar y Anderson Quintero no regresaron después de un permiso de 24 horas otorgado el 20 de diciembre de 2024.

Según las autoridades, ambos soldados tenían citas programadas en Florencia, Caquetá, y se presume que podrían estar en Cartago, Valle del Cauca, luego de que fueron vistos en cámaras de seguridad del municipio. En este momento, no hay indicios de que se trate de un secuestro, aunque la investigación continúa.

Un equipo de búsqueda, con el apoyo de la Policía, desplegó en Florencia y Cartago para localizar a los soldados desaparecidos. La madre de uno de los soldados ha denunciado la desaparición, lo que ha generado una gran preocupación entre las familias y las autoridades.

La desaparición de estos soldados en una región como Caquetá, conocida por su complejidad geográfica y seguridad, ha activado todos los protocolos de búsqueda y rescate. Las autoridades están trabajando para esclarecer las circunstancias de su desaparición y asegurar su pronta localización.