Con un aumento del 50% en los casos de secuestro en Colombia, según informes del Gaula de la Policía. El coronel Giovanni Cristancho, director de esta unidad especializada, detalla la complejidad de la situación, señalando que "diez casos corresponden a disidencias de las Farc, cuatro al ELN, y el restante a grupos de delincuencia común". Este incremento, a pesar de los esfuerzos de la Policía, evidencia un preocupante resurgimiento de este delito.
En entrevista, el coronel Cristancho destaca la labor policial, que llevó hasta el momento a la captura de 630 personas por secuestro, un 17% más que en el año precedente. Sin embargo, resalta que el 90% de los detenidos permanecen bajo medidas de aseguramiento, subrayando la complejidad judicial asociada a estos casos.
La retención de 21 personas en cautiverio, abarcando desde secuestros extorsivos hasta ajustes de cuentas, agrega una capa adicional de urgencia al problema. Aunque la disidencia de Iván Mordisco anunció la suspensión de secuestros con "fines económicos", persisten las inquietudes sobre la eficacia de estas medidas en medio de las negociaciones de paz.
El coronel también explicó que las disidencias de las Farc mantienen diez personas en cautiverio, distribuidas en distintas regiones del país. Paralelamente, el ELN retiene a cuatro víctimas en ubicaciones diversas. Este escenario, en pleno proceso de paz, presenta un desafío significativo para las autoridades, que ven restringida su capacidad de acción contra estos grupos.
El director del Gaula comparte, además, los resultados de una operación masiva contra la extorsión, desvelando la magnitud del problema. Se han presentado más de 9,000 denuncias de extorsión este año, pero el 77% de las víctimas se niega a pagar. La Policía capturó a 2,708 personas, un 12% más que el año pasado, subrayando la efectividad de las operaciones.
En una redada en cárceles, se logró intervenir en 18 establecimientos de reclusión, incautando 577 celulares, 709 simcards, 458 armas cortopunzantes y nueve kilogramos de estupefacientes, entre otros elementos relacionados con la extorsión. Estos datos reflejan el compromiso de las autoridades en abordar no solo el problema del secuestro sino también sus raíces, incluida la extorsión desde las cárceles.