La operatividad del Cuerpo Oficial de Bomberos de Medellín enfrenta un serio revés, ya que la falta de renovación del Seguro Obligatorio de Accidentes de Tránsito (SOAT) dejó a las ocho estaciones sin la capacidad de movilizar la mayoría de sus vehículos. En medio de esta crisis, solo dos unidades operativas luchan por mantener la respuesta a emergencias, mientras la ciudad se encuentra en una encrucijada sin precedentes.

El concejal Daniel Duque expusó la crítica situación que enfrenta el Cuerpo Oficial de Bomberos de Medellín, revelando que ninguna de las máquinas de las ocho estaciones puede circular debido a la falta de renovación del SOAT. Esta situación coloca a la ciudad en una posición de vulnerabilidad, ya que la capacidad de respuesta de los bomberos se ve gravemente comprometida.

"Las camionetas que están disponibles tienen un tanque de 250L, que no permitiría atender incendios estructurales, edificios, casas, fábricas e incendios forestales de gran tamaño", destaca Duque, enfatizando la incapacidad de las unidades disponibles.

Duque también ha denunciado amenazas a los bomberos por parte del subdirector del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo de Desastres de Medellín (Dagrd). Según el concejal, se estaría presionando a los bomberos para que utilicen los vehículos sin SOAT bajo amenaza de procesos disciplinarios internos.

"El subdirector del Dagrd está amenazando a los bomberos que, si no utilizan los vehículos para atender las emergencias, les inician un proceso disciplinario interno", afirma Duque.

A pesar de la parálisis en la mayoría de las estaciones, actualmente solo las estaciones Libertadores y Guayabal cuentan con una camioneta cada una que aún tiene el SOAT vigente, permitiéndoles operar. Sin embargo, la capacidad limitada de estas dos unidades plantea desafíos significativos para atender emergencias de gran envergadura.

Frente a las acusaciones, el Dagrd emitió un comunicado desmintiendo las afirmaciones y asegurando que la compra oportuna de los SOAT se realizó para garantizar la cobertura desde el 1 de diciembre de 2023. No obstante, la situación operativa actual parece contradecir esta afirmación oficial.

En medio de esta incertidumbre, la ciudad de Medellín se encuentra en una situación de riesgo, con los bomberos limitados en su capacidad de respuesta y la seguridad ciudadana en entredicho. La urgencia de solucionar esta crisis es evidente, exigiendo respuestas inmediatas y medidas correctivas por parte de las autoridades competentes. La seguridad y tranquilidad de los habitantes de Medellín están en juego.