El enviado especial de la ONU para Colombia afirmó este martes ante el Consejo de Seguridad que la falta de presencia estatal en las regiones más abandonadas del país ha incidido en la reciente escalada de violencia entre grupos guerrilleros que buscan el control del territorio.
"Es en el vacío de la presencia estatal donde los grupos armados ilegales luchan por el control territorial y social. La aplicación del Acuerdo de Paz es fundamental para encontrar soluciones duraderas que prevengan y resuelvan las causas del conflicto armado", dijo Carlos Ruiz Massieu, encargado de verificar el cumplimiento de dicho acuerdo firmado en 2016.
El reciente recrudecimiento de la violencia entre la guerrilla Ejército de Liberación Nacional (Eln) y grupos disidentes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que no se acogieron al acuerdo, ha dejado más de un centenar de muertos y unos 32.000 desplazados en los últimos días, la mayoría en la región de Catacumbo, en la frontera con Venezuela.
Muchas de las víctimas fueron atacadas específicamente y asesinadas, recordó el funcionario en la revisión trimestral del avance del acuerdo en el marco del organismo de la ONU.
"Catatumbo, al igual que otras muchas regiones de Colombia, sigue esperando a beneficiarse de los logros del acuerdo de paz de 2016", como con "servicios públicos, economías legales, oportunidades de desarrollo y seguridad", recordó.
"La violencia erosiona la confianza y la legitimidad entre las partes, comunidades y la opinión pública en general", advirtió.
"Solamente implementando a cabalidad el acuerdo y logrando una presencia integral del estado en zonas marginadas desde hace tiempo, el país podrá superar los factores que siguen incitando el conflicto", agregó.
Ante esta escalada de violencia, el presidente Gustavo Petro anunció la suspensión del diálogo con el Eln en el marco de su iniciativa Paz Total para lograr poner fin a un conflicto que dura décadas.
Para el funcionario de la ONU, los avances no solo van a depender de la voluntad política, sino de que se establezcan "objetivos y prioridades claras" y se les dote con financiamiento.
En este sentido, se congratuló "por las recientes garantías dadas por el presidente Petro, que indicaba que los presupuestos para el acuerdo de paz se protegerán a pesar de la situación financiera compleja del país" y el plan de respuesta rápida del Ministerio de Interior, que busca acelerar la implementación, en particular en los proyectos de infraestructura en las regiones priorizadas y en la reforma rural.
"Vamos a implementar y seguiremos implementando el acuerdo de paz", dijo por su parte el canciller Luis Gilberto Murillo, en su última actividad como ministro después de anunciar su dimisión, y pidió a los miembros del Consejo de Seguridad su apoyo a los acuerdos.
Ante el reciente asesinato de al menos cinco firmantes del acuerdo, el exguerrillero Diego Tovar, exmiembro de las Farc, recordó en el foro de la ONU que la impunidad "sigue altísima" y llega "al 90%" según la ONU.