Un escalón más se subió en el camino para que la Unesco declare el Darién Norte Chocoano como reserva de biósfera.
La Corporación Autónoma Regional para el Desarrollo Sostenible del Chocó (Codechocó), ya remitió el dossier propuesta de nominación al Ministerio de Ambiente y de manera oficial fue presentado a la Unesco por parte del Ministerio de Relaciones Exteriores.
De esta forma, la iniciativa regional, que fue trabajada por más de un año entre Codechocó como autoridad ambiental y 10 comunidades étnicas de los municipios de Acandí y Unguía, los entes territoriales, las reservas de la sociedad civil, representantes de sectores productivos, y con el respaldo y acompañamiento del Ministerio de Ambiente, entre otras entidades del SINA, inició su camino al interior de la Unesco, para convertirse en una Reserva de Biósfera de reconocimiento mundial.
“Nos sentimos muy complacidos con el respaldo que hemos recibido a nivel nacional, para reconocer esta zona de nuestro Departamento como patrimonio de biósfera de la humanidad, lo cual se convertirá en un gran aporte para la estrategia de conservación que venimos liderando en conjunto con las comunidades y las cuales contribuyen a la conservación de la biodiversidad, la mitigación del cambio climático y el bienestar de la sociedad, además de promover el desarrollo económico sostenible del área delimitada de la reserva”, expresó Arnold Rincón López, director de Codechocó.
Con la futura designación del Darién Norte Chocoano como Reserva de Biosfera de la Unesco, se fortalecerá la gobernanza territorial y el empoderamiento local; el fomento de actividades económicas basadas en la conservación de la naturaleza; la preservación de las culturas afrocolombianas, indígenas y campesinas; la inversión en productos forestales sostenibles; el mejoramiento de las tecnologías y las buenas prácticas agrícolas y el impulso de los mercados para productos comunitarios.
“Este es un esfuerzo que ha surgido de las comunidades y autoridades regionales, con el apoyo de entidades a nivel nacional. Varios resguardos indígenas y comunidades afrocolombianas con sus consejos comunitarios están involucradas en esta Reserva de Biosfera” indicó la viceministra de Asuntos Multilaterales, Elizabeth Taylor Jay, quien además aseguró que esto es una iniciativa a la que se han sumado muchas manos.
Destacó que “esta es una gran noticia para Colombia. El tapón del Darién es uno de los lugares con mayor biodiversidad en nuestro país, hace parte del chocó biogeográfico y uno de los aspectos que más llama la atención de la Unesco es el mosaico de ecosistemas marinos y costeros que vemos reflejado en esa zona donde confluyen un parque nacional, dos distritos de manejo regional y una gran reserva forestal”.
El Gobierno de Colombia confía en que el futuro reconocimiento del Darién Norte Chocoano como Reserva de Biosfera contribuirá significativamente a la conservación de la diversidad biológica (CDB), la mitigación y adaptación al cambio climático, y el bienestar de la sociedad en su conjunto; permitiendo la implementación de esquemas de gobernanza territorial, social y ambiental más robustos e inclusivos que, se espera, a su vez, repercutan positivamente en la gestión y resolución de los inmensos retos y desafíos que allí se presentan, de manera articulada con la política de paz total que impulsa decididamente este Gobierno.
Es importante mencionar que el Darién Norte Chocoano será una Reserva de Biosfera creada por la gente, para la gente y la naturaleza, que cuenta con un gran potencial para fomentar el desarrollo económico y humano sostenible, gracias a las prácticas ancestrales de sus habitantes y al fomento de acciones ligadas a iniciativas transformadoras como el Plan Nacional de Negocios Verdes, orientado al crecimiento económico, la generación de empleo y la conservación de la riqueza natural de nuestro país.
El pasado 15 de junio, la Unesco a través del Programa sobre el Hombre y la Biosfera (MAB) declaró la primera Reserva de Biósfera del Pacífico colombiano, “Tribugá -Cupica-Baudó”, ubicada en el departamento del Chocó, la cual tiene una superficie aproximada de 546.605, 06 hectáreas y una población de 18.000 habitantes, en su mayoría indígenas emberá y afrodescendientes.
La Reserva cuenta con una gran variedad de paisajes (acantilados, estuarios, costas, golfos, ensenadas, bahías y zonas marinas) y ecosistemas (arrecifes, manglares, bosque tropical) ricos en biodiversidad, así como una gran cantidad de especies, algunas bajo amenaza por extinción, que actúan como prioridades globales para la conservación.
El proceso de declaratoria de esta nueva reserva de Biósfera, contó con participación de comunidades negras e indígenas de los municipios de Bahía Solano, Nuquí y Juradó, instituciones Alcaldías, Codechoco, Aunap, IIAP, Invemar, MADS, ONG y otros sectores, quienes vieron que bajo esta denominación se puede continuar protegiendo la gran biodiversidad que alberga el Pacífico norte chocoano.