Columnistas | El Nuevo Siglo
MUY IMPORTANTE
Lo que dijo el Vicefiscal de la CPI
ES  muy importante para Colombia haber escuchado al Vicefiscal de la CPI con ocasión de su visita a nuestro país. Entre otras cosas, ¿qué dijo?
1.    “Sin perjuicio del continuo interés académico en la interface entre “paz y justicia” , la relación entre paz y justicia es una cuestión ya decidida con arreglo al Estatuto de Roma”;
Glifosato
 
El tema del glifosato, es decir, el de  su uso para erradicar cultivos ilícitos no es nuevo, y lo curioso es que en nuestro país, sus autoridades han cambiado radicalmente de opinión sobre este particular. Tanto que fue en su momento uno de los factores de distanciamiento entre Colombia y Ecuador. Acudo a mi memoria, a lo que me acuerdo que sucedió entre los dos países uno de los cuales es el mío.
Los chicharrones de Luna 
 
SE  va el ministro de las TIC, Diego  Molano, con un palmarés notable de logros y avances. No obstante le deja unos pocos chicharrones de gran envergadura a su sucesor, el ministro David Luna, que es pertinente que le recordemos para que inicie su gestión con sabia cautela en un sector que puede ser novedoso para él, si bien hay que abonarle su tradición como político serio y competente. Veamos algunos.
 
BLANCO Y NEGRO
La machaca de Ordóñez
PUERTO LIBERTAD
¿Mucho pedir?
Me  preocupa el relanzamiento de Peñalosa.
No me asusta que gane: me da miedo que pierdan él y Pardo. Y sobre todo, Bogotá.
La gente que votaría por Peñalosa o por Pardo es sustancialmente la misma. La que está cansada de ineficacia, hamponería y mugre, huecos y guachadas que llueven por todas partes, como en las duchas de veinte chorros. La gente que no traga populismos baratos, ni le echa leña al fuego de la lucha de clases.
MENSAJE CLARO
¡Más luz!
SI  en un país unánimemente partidario de la paz solo el  veintiséis por ciento de su gente cree que se firmará un acuerdo dentro del proceso que está en marcha, el mensaje no puede ser más claro: los colombianos quieren y creen en la paz pero no en el proceso de La Habana.
¿Por qué?