Los odios políticos
Benito Juárez sentenció: “La paz es el respeto al derecho ajeno”. El cristianismo fue más allá: “No basta respetar al otro, hay que ayudarlo”. Mejor que la simple coexistencia, es la convivencia constructiva y fecunda.
Si se contesta el odio con el odio ¿cuándo se acabará el odio? Caín mató a Abel, es decir, se exterminó al bueno, y todos descendemos de un homicida.