¡Bogotá, despierta!
“Irónico sería que se premiara a la izquierda y al Polo”
BOGOTÁ va de mal en peor. Su futuro no es muy halagador que digamos. Lo primero que debería hacer el próximo alcalde, quien no la tendrá fácil, sería pedirle las cuentas claras y el chocolate espeso a Clarita, como la llama cariñosamente Samuel, quien nada que renuncia, por los sobrecostos en las obras inconclusas.