Dos empresarios condenados por escándalo de Odebrecht | El Nuevo Siglo
Foto AFP
Jueves, 8 de Abril de 2021
Redacción Web

Los empresarios Federico Gaviria Velásquez y Eduardo José Zambrano Caicedo fueron condenados, este 8 de abril, por el juez Séptimo Penal del Circuito Especializado de Bogotá por delitos relacionados con el caso Odebrecht.

Tanto Gaviria y Zambrano reconocieron su participación en la “empresa criminal, en la que se concertaron con funcionarios y directivos de la firma brasileña para asegurar la adjudicación de obras civiles”, de acuerdo al ente investigador. También fueron hallados culpables de ayudar a mejorar las condiciones contractuales para el consorcio.

Gaviria y Zambrano fueron pieza clave en la celebración de varios contratos fantasma para garantizar que la distribución de los sobornos ofrecidos por representantes de Odebrecht en Colombia se destinarán a varios congresistas y funcionarios púbicos. 

Federico Gaviria Velásquez fue condenado a seis años y siete meses tras las rejas por los delitos de concierto para delinquir, lavado de activos y enriquecimiento ilícito de particulares. Además, se le imputo una multa de 11.586 salarios mínimos legales mensuales vigentes y quedó inhabilitado para ocupar cargos de elección popular.


Relacionados: Trasladan al ‘Ñoño’ Elías de la cárcel La Picota al Cantón Norte


Vale mencionar que a Gaviria Velásquez, el juez le concedió el beneficio de libertad condicional por redención de la pena.

Mientras que a Eduardo José Zambrano Caicedo se le condenó a cinco años y once meses de prisión por el delito de enriquecimiento ilícito de particulares y se le impuso el pago de una multa de 598 salarios mínimos legales mensuales vigentes, además de inhabilitársele de manera intemporal para cargos de elección popular.

A diferencia de Gaviria Velásquez, no se le concedió libertad condicional, sino que se le ordenó el traslado inmediato al centro penitenciario que disponga el Inpec.

“Quedó demostrado que los sentenciados participaron en la celebración de una serie de contratos simulados o ficticios para garantizar que los recursos ofrecidos por algunos representantes de las empresas de Odebrecht en Colombia fueran distribuidos entre los funcionarios y particulares, que intervinieron y lograron beneficios para la multinacional en diferentes contratos”, señaló el ente investigador y acusador.