PROTECCIÓN PARA los firmantes del Acuerdo de Paz exigió ayer al jefe de Estado el presidente del Partido Comunes, Rodrigo Londoño, tras el segundo crimen en apenas cinco días del nuevo año.

El pasado primero de enero, fue asesinado William Alvarado Guzmán, de 62 años de edad, en zona rural del municipio de Garzón, en el departamento del Huila, quien habría perdido la vida en una riña, según las autoridades. Horas después fue capturado un sujeto señalado como el responsable de este crimen.

El coronel Carlos Téllez Betancourt, comandante del Departamento de Policía Huila, dijo que “en la vereda Bella Vista, zona rural del municipio de Garzón, se logró la captura del sujeto que, en medio de una riña por temas de intolerancia, habría agredido con arma blanca a William Alvarado Guzmán, de 63 años de edad, ocasionándole la muerte tras recibir una herida con arma cortopunzante en la región torácica”.

En tanto que ayer, la violencia volvió a cobrar una víctima entre los desmovilizados de la entonces guerrilla de las Farc que se acogieron al Acuerdo de Paz que se firmó en el 2016 con el gobierno de Juan Manuel Santos. El caso ocurrió en el municipio de San Vicente del Caguán, en el departamento del Meta, donde fue asesinado Wilmer Ruiz Delgado, de 41 años de edad.

Se informó que sujetos armados buscaron a Ruiz Delgado en el barrio Cataleya de este municipio y le dispararon.

Rodrigo Londoño se lamentó porque “no hemos finalizado la primera semana de este nuevo año 2025 y ya nos enfrentamos al doloroso asesinato de otro firmante de paz. Wilmer es la víctima número 445. Basta ya de indiferencia y de impunidad. Exigimos protección y respeto por la vida”.

El directivo partidista dirigiéndose al presidente dijo que “el 2025 nos recibió con los problemas y angustias con las que nos despidió el 2024, y que usted prometió resolver el mes pasado. Siguen los asesinatos de firmantes (ya 444) y aún no se desembolsa la renta básica a los reincorporados. ¿Qué sucede?”.

Agregó Londoño que “presidente Gustavo Petro, siempre supimos que los amantes de la guerra buscarían sabotear el Acuerdo de Paz. Un gobierno progresista, de transición hacia un régimen más democrático, era necesario para blindar la paz y el pueblo lo logró. Le pido honre el mandato popular”.

El año anterior fueron asesinados 31 firmantes del Acuerdo de Paz, según cifras entregadas por el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz).