La Fiscalía General de la Nación imputó al recién designado ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, durante octubre del 2024, señalado de los presuntos delitos de tráfico de influencias de servidor público y cohecho impropio.

Según la investigación del ente acusador, durante el tiempo en el que Sanguino fue concejal de Bogotá (entre 2008 y 2011), "habría intercedido ante el entonces alcalde de la ciudad y el secretario de Salud de la época, para que nombraran a una persona de su confianza en la gerencia del Hospital de Usme".

La Fiscalía señaló a Sanguino de los presuntos delitos de tráfico de influencias de servidor público y cohecho impropio, por supuestamente haber presionado para que se diera el nombramiento de una cuota política en el Hospital de Usme, con lo cual, aparentemente, esperaban repartirse porcentajes de ganancias de los dineros destinados a la construcción del centro médico.

El ahora ministro, deberá continuar el proceso frente a la justicia hasta que se aclare lo ocurrido.

Según información de la W, el escrito de acusaciones fue radicado durante el pasado mes de enero. Por el momento, está pendiente la fecha de audiencia en la que se definirá si tendrá que enfrentar a juicio o no.