La verdadera prueba de fuego a Duque | El Nuevo Siglo
Foto cortesía
Sábado, 10 de Marzo de 2018
Redacción Política
Es claro que no sólo interesa saber quién es el candidato de la coalición, sino quién gana el pulso con Petro y cómo le va a Duque y a su alianza frente a la votación de otros partidos al Legislativo
__________________________

La consulta abierta en la que este domingo compiten los candidatos Iván Duque, del Centro Democrático, así como Marta Lucía Ramírez y Alejandro Ordóñez, ambos respaldados en movimientos por firmas, va más allá de la escogencia de uno de ellos como el aspirante oficial de esta coalición de derecha en pos de ganar la Casa de Nariño.

Los tres saben que el ganador no sólo tendría una oportunidad muy alta de pasar, el 27 de mayo, a la segunda vuelta presidencial, sino de liderar una coalición aún más grande con sectores de la centro-derecha e incluso del centro.

Y también saben los tres que quien quede segundo en las urnas no deberá resignarse a la formalidad de salir a felicitar al ganador y prometerle respaldo en el resto de la campaña, sino que, de inmediato, se erigirá como la fórmula vicepresidencial.

A todo lo anterior debe sumarse que esta consulta tiene otros ingredientes que la hacen muy atractiva. En primer lugar, que el desempeño electoral de Duque, un senador hasta hace pocos meses desconocido para la mayoría del país, reflejará qué tanta influencia y arrastre político y electoral continúa teniendo el expresidente Uribe, quien encabeza la lista al Senado del Centro Democrático. No pocos analistas prevén que el exmandatario sacará, él solo, más de 1,5 millones de votos. La pregunta es ¿Duque tendrá guarismos parecidos al de su páter político?

Hasta el momento, las encuestas dan como favorito a Duque para ganar la consulta interpartidista, pero el hecho de que la figura caudillista de Uribe siga eclipsando a todo su partido, podría granjearle una sorpresa desagradable en las urnas.

Por otra parte, hay mucha expectativa sobre lo que pueda pasar con Ramírez, ya que en 2014 alcanzó a sumar alrededor de dos millones de votos en la primera vuelta. Claro, en ese entonces era la candidata presidencial de los conservadores, y tanto ella como Clara López (que sacó una votación similar a nombre del Polo pero hoy es fórmula vicepresidencial de Humberto de la Calle) eran vistas como alternativas a la polarización entre santistas y uribistas.

Para no pocos analistas, si bien Ramírez va en desventaja ante Duque, tiene cómo competirle en las urnas, más aún porque se dice que sectores antiuribistas se lanzarán a votar hoy por ella con tal de cerrarle el paso al pupilo del expresidente, que todo indica volverá a ser el fenómeno electoral este domingo, según lo vaticinan la mayoría de los sondeos. 

ramirez

Es más Ramírez, apoyada por el expresidente Andrés Pastrana, por mal que le vaya podría asegurar la fórmula vicepresidencial, una chance muy importante si se tiene en cuenta que el aspirante uribista ya figura en la punta de las encuestas de preferencias generales, empatado con Gustavo Petro.

En cuanto a Ordóñez es indudable que es el candidato más débil del triunvirato de esta coalición, pero en sus toldas aseguran que hay una especie de voto oculto, radical si se quiere, que se manifestará por él en las urnas, sobre todo por sus ideas férreas sobre la defensa de los conceptos más ortodoxos sobre la familia y su crítica sin cuartel al acuerdo de paz con las Farc. Una crítica frente a la cual tanto Ramírez como Duque, paradójicamente, parecen moderados, pero con la que aspira a impactar a sectores muy definidos de la sociedad que no admiten la menor flexibilidad o perdón a la guerrilla, ni tampoco le reconocen algo bueno al gobierno Santos.

Interrogantes

Pero hay más en juego en la competencia de Duque, Ramírez y Ordóñez. Por ejemplo, estando en la otra consulta interpartidista Petro, es obvio que la ciudadanía le pondrá mucha atención a los volúmenes de votos que saquen el aspirante uribista y el exalcalde bogotano, puesto que ambos están encabezando las encuestas.

Si Duque llegara a tener menos votos que Petro, sería un golpe muy fuerte para el aspirante uribista, y viceversa. Claro, el Centro Democrático es una estructura partidista muy fuerte, que es posible que hoy saque la mayor cantidad de curules en Senado y Cámara (lo que le implicaría sumar más de 2 millones de votos), algo que Petro no tiene, pues apenas si respalda la llamada “lista de los decentes”, pero esta no se sabe si alcance el umbral electoral, que estará por los lados de los 400 mil votos.

Por otra parte, es obvio también que la votación de esta coalición de derecha se comparará con las que saquen los partidos de aquellos candidatos que tienen la clara desventaja de que no están en competencia en estas consultas ni han tenido la exposición mediática ni pudieron hacer uso de la ofensiva publicitaria, sobre todo en televisión, que sí Duque y Petro.

Así, por ejemplo, la votación de Duque y Petro se pondrá en la misma tabla rasa frente a la de Cambio Radical (que respalda a Germán Vargas Lleras), el partido Liberal (que tiene como su candidato oficial a De la Calle) y la sumatoria de la Alianza Verde y el Polo (que apoyan a Sergio Fajardo).

Por igual, y sería ingenuo desconocerlo, es evidente que también se compararán tanto la votación de la coalición Duque-Ramírez-Ordóñez, y la individual de Duque, con los guarismos que saquen tanto el partido Conservador como el de La U para Senado.

ordoñez

No hay que olvidar que estas dos colectividades no tienen candidato presidencial y anunciaron que después del mapa político que salga hoy de las elecciones al Congreso, definirán a qué aspirante a la Casa de Nariño apoyan.

Y no faltarán los que comparen la votación Duque-Ramírez-Ordóñez con la que sacó Oscar Iván Zuluaga en 2014, en la primera y segunda vueltas, o la del “No” en el plebiscito refrendatorio de paz en octubre de 2016. 

Como se ve, en la consulta de la derecha hay mucho más en juego que saber quién encabeza el tiquete presidencial de la coalición.