Moción de censura: seis debates a ministros de Petro y contando… | El Nuevo Siglo
EL MINISTRO de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, será llamado a moción de censura. /Foto RTVC Noticias
Viernes, 5 de Enero de 2024
Redacción Política

POR EL escándalo al cancelarse los Juegos Panamericanos en Barranquilla en 2027, la ministra del Deporte, Astrid Rodríguez, será llevada a moción de censura a partir de febrero, cuando inicie el segundo periodo de la segunda legislatura. Será el quinto titular de cartera de la administración Petro en ser puesto al escrutinio del Congreso bajo esta figura.

También en diciembre pasado, los partidos de oposición Cambio Radical y el Centro Democrático radicaron una solicitud en este sentido contra el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo. De esta forma, la administración Petro en menos de dos años del mandato va rumbo a superar en número de mociones de censura las que afrontaron en 4 años los gobiernos de César Gaviria; Ernesto Samper; Andrés Pastrana; los dos mandatos de Álvaro Uribe; los dos mandatos de Juan Manuel Santos; y el de Iván Duque.

Se han llevado a cabo

La moción de censura es otra de las herramientas de control político incorporadas por la Constitución del 91, entregada al Congreso, las asambleas y los concejos y que les permite hacer retirar del cargo a ministros, secretarios y directores de instituciones en los distintos niveles de gobierno por considerar que es deficiente su gestión.

Sin embargo, en el caso del Congreso ninguna de las cerca de 40 mociones de censura que se han llevado a cabo en los últimos 32 años ha sacado del cargo un ministro, ya sea porque no se han logrado los votos necesarios o porque, en algunas situaciones, han renunciado ante la seria posibilidad de que fuera aprobada por la plenaria de la Cámara o el Senado.

El senador David Luna, de Cambio Radical, responsabilizó al Gobierno nacional porque se perdiera para Barranquilla la sede de esta importante justa deportiva, después de que no cumplió con el pago en los tiempos establecidos de 8 millones de dólares a Panam Sports (Organización Deportiva Panamericana).

“Es lamentable que, existiendo los recursos para pagar y honrar los compromisos internacionales, y así poder organizar los Juegos Panamericanos del año 2027, el país no lo haya hecho. Por esa razón voy a presentar la moción de censura, la ministra tiene una responsabilidad política con los colombianos y debe responder por ella, abandonando su cargo. No podemos seguir tolerando y permitiendo esta vergüenza nacional e internacional”, expresó el senador Luna.

Han circulado versiones en el sentido de que la ministra del Deporte renunciaría en las próximas horas, por el tamaño del escándalo debido a lo sucedido con los Juegos Panamericanos y la posibilidad de ser relevada del cargo por la moción de censura que se impulsa en su contra en el Congreso.

ENS

En cuanto a la moción de censura que impulsan contra el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, la iniciativa brotó después de que sostuviera que, en la pandemia, “triplicaron las camas de cuidado intensivo porque era un negocio. Ningún país del mundo tuvo que ampliar las UCI como las ampliamos aquí”.

Igualmente, responsabilizan al ministro por la escasez de medicamentos y los pagos pendientes a las EPS.

Uno de los impulsores, el representante Julio César Triana, de Cambio Radical, dijo que “el ministro de Salud ha incurrido en graves imprecisiones que muestran un sesgo ideológico que determina su gestión, al afirmar que los colombianos fueron factor de experimentación durante el proceso de vacunación contra la Covid-19, lo cual pone en duda la transparencia y la responsabilidad del Estado durante este proceso”.

La primera moción de censura a un ministro del actual Gobierno fue impulsada a finales de octubre pasado contra la entonces titular de Minas, Irene Vélez, por iniciativa de Cambio Radical. Los impulsores de la medida consideraron que la funcionaria no estaba preparada para el cargo y que sus declaraciones sobre la necesidad, que dijo, de frenar la exploración de petróleo por el efecto de los combustibles fósiles en el cambio climático, generaban incertidumbre económica.

La iniciativa de moción llegó a votación y en diciembre del año pasado fue negada en la plenaria de Cámara por 132 votos en contra y solo 24 a favor.

En marzo pasado, la entonces ministra Vélez Torres nuevamente fue llevada a moción de censura, esa vez en la plenaria del Senado, donde igualmente las mayorías de la coalición gubernamental garantizaron su permanencia en el cargo con 57 votos por el no y 16 por el sí.

La moción de censura en esa oportunidad a la ministra de Minas fue por la polémica que surgió por unas cifras que entregó sobre reservas de gas en Colombia en el Foro Económico Mundial de Davos, en Suiza, que supuestamente no corresponden a la realidad, como lo indicó entonces la viceministra de Energía, Belizza Ruiz, quien en medio de esta discusión renunció al cargo.

En tanto que, en abril pasado, se promovió una moción contra el canciller Álvaro Leyva por sus incumplimientos a citaciones en la Comisión Segunda de la Cámara.

Por esos días la representante a la Cámara, Erika Sánchez, explicó que “se programa por los incumplimientos de las nueve invitaciones que se le hace desde la Comisión Segunda al canciller en función de nuestro control político que es obligatoriedad y es una función legislativa que tenemos como congresista”.

De todas formas, el pasado 24 de abril, el canciller salió airoso de esta moción de censura en la plenaria de la Cámara de Representantes, en donde 108 parlamentarios votaron en contra y 13 a favor de la medida.

Finalmente, el pasado 3 de mayo el ministro de Defensa Iván Velázquez fue llevado a moción de censura en la plenaria de la Cámara, como consecuencia del secuestro de 74 policías y, posterior muerte de uno de ellos, además de un civil, durante los enfrentamientos con la comunidad en las instalaciones de Emerald Energy en el sector Los Pozos, en San Vicente del Caguán.

El Gobierno entonces dijo que se trató de una retención de los policías y no de un secuestro, y justificó que no acudió a la fuerza para liberarlos, sino al diálogo con los campesinos que protestaban para evitar derramamiento de sangre.

La plenaria de la Cámara con 115 votos por el no y 17 por el sí negó en esa oportunidad la moción de censura contra el ministro de Defensa.