La Unión Patriótica tiene la intención de participar en los comicios territoriales de octubre próximo, después de que el año pasado el Consejo de Estado le ordenó al Consejo Nacional Electoral devolverle la personería jurídica que le quitó en el 2002, al no presentarse a las elecciones por el genocidio de que fue objeto.
Sin embargo, la presidenta de la UP, Aída Avella, dijo que en esta oportunidad pareciera que reviviera el pasado porque han vuelto las amenazas contra sus sedes políticas y candidatos.
EL NUEVO SIGLO: ¿Qué ha definido la UP para las elecciones de marzo próximo?
AÍDA AVELLA: Estamos haciendo un trabajo nacional en procura de buscar la más amplia unidad con todos los sectores alternativos y los sectores de izquierda. Estamos trabajando en todo el país, y desde luego que tenemos toda la intención de participar, aunque vemos algunos inconvenientes muy graves: uno es el avance del paramilitarismo en todo el país. Caminando por Sucre, por el alto Sinú, por Córdoba, por el Cesar, por el Atlántico, pero también en el Cauca, viejo Caldas, todo el país se está reparamilitarizando y rearmando, y eso nos preocupa terriblemente porque no entendemos cómo en medio de un proceso de paz se pueden dar fenómenos de este tipo que pensábamos se habían calmado.
Y lo otro es la altísima militarización que hay en el país. Por ejemplo, he recorrido varios departamentos de la costa, todo el mundo dice que “no entendemos por qué en este año se ha aumentado tanto la injerencia militar en muchísimas zonas de Colombia. Y entonces la gente empieza como a amedrentarse, es normal, porque ahora es que se debían estar calmando todas las cosas”.
Entonces tenemos esa cuestión adversa también para la participación, no solamente nuestra sino de sectores populares. Por ejemplo, los indígenas en el Cauca han sido víctimas de una masacre hace algunos días. En Suárez sacaron cinco indígenas y los mataron. Personas muy armadas, todas vestidas de negro, llegaron a sus casas y los mataron. Y también en Riosucio en Caldas mataron a un dirigente, que era presidente de un sindicato minero de los artesanales. Lo asesinaron delante de toda su familia.
Vemos que hay un ambiente muy fuerte que vamos a tener que tratar de bajarlo entre todos porque si esto sigue así, no sé cuál será el resultado electoral de este país. ¿Otra vez los paramilitares van a imponer en la costa sus candidatos?, ¿otra vez van a presionar al pueblo a que vote por ellos?
Creo que las elecciones pueden verse atravesadas por toda esta situación tan difícil que tenemos en este momento.
ENS: ¿Qué expectativa tiene la UP de movilizar a las urnas a sus simpatizantes teniendo en cuenta que en las presidenciales de 2014 no alcanzaron ni 100 mil votos? ¿Han reorganizado sus estructuras?
AA: Sí, hemos estado creando las juntas departamentales y algunas juntas municipales de la Unión Patriótica, el problema es que junta que creemos, junta que amenazan. Pareciera que no hubiese cambiado nada en este país. Por ejemplo han intentado entrarse dos veces a la sede de la Unión Patriótica en el Huila. Han forzado las puertas, han intentado tumbarlas. Nuestros candidatos a la Cámara y al Senado han sido realmente muy amenazados.
Le hablo de cosas muy complicadas, por ejemplo, en el Cauca nos está pasando una cosa muy especial y es que la gente que se va a lanzar por nuestro Partido, me refiero a Marino Grueso, por ejemplo, en Guapi, la emisora de la Marina que opera en este municipio lo llama a que se desmovilice, ¡qué es esto por Dios! Los jóvenes que también iban a participar de candidatos en Sucre también y en el Cauca, las emisora del Ejército lo llama a que se desmovilice.
Son cosas de la persecución pasada que pareciera volvieran a revivir, y esto nos tiene muy preocupados.
Tenemos la mayor esperanza de participar, de poder mover a nuestra gente, pero también tenemos temores y sigue el temor de que esto se vuelva a repetir, y nosotros no estaríamos dispuestos a ir a un segundo genocidio.
Nuevas amenazas
La Corporación Reiniciar denunció ayer nuevas amenazas que a nombre de las llamadas Águilas Negras fueron recibidas vía correo certificado en la sede de la Unión Patriótica en contra de su Presidenta nacional, Aída Avella, y todos los candidatos que en representación de la organización participarán en la próxima campaña electoral.
Agrega dicha Corporación para la defensa de los derechos humanos que mientras las amenazas se acrecientan “los esquemas de seguridad a sus miembros se debilitan”.