¿TASA DE 9%? Tras el dato de la inflación a julio (6,86 % anualizada), en la presentación esta semana de un nuevo producto de su compañía se le preguntó a un reconocido dirigente empresarial si creía que la junta directiva del Banco de la República, cuyo gerente es Leonardo Villar, va a seguir bajando las tasas de interés, hoy en 10,75 %. Respondió que es muy seguro que el Emisor continúe por la senda de abaratar el crédito y darle más liquidez a la economía, razón por la cual él apostaba a que las tasas del Banco podrían estar cerrando este año por debajo del 9 %.
TRES ELEMENTOS CLAVES. La misma fuente indicó que el balón ahora estaba en el campo del Gobierno, sobre todo en el sentido de fortalecer las medidas para reactivar la economía. Señaló tres elementos claves. El primero, la estabilización de la situación fiscal a nivel central, ya que la crisis financiera se está convirtiendo en un freno de la inversión y el clima de negocios a corto plazo. El segundo tendría que ver con controlar los ejes de presión inflacionaria en este segundo semestre, sobre todo en lo que tiene que ver con el impacto del fenómeno de La Niña, el aumento de los precios de los peajes y lo que vaya a pasar con el valor del diésel. Y, finalmente, el tercer tema sería concretar una agenda de reactivación con el sector privado.
CRÍTICAS AL SANEDRÍN. Molestos se encuentran algunos congresistas del Pacto Histórico por lo que consideran una especie de aislamiento del presidente Petro por parte de sus principales asesores en la Casa de Nariño. Advierten que el acceso resulta casi imposible cada vez que alguno de los parlamentarios de su coalición pide una cita con el mandatario. Incluso, se han escuchado quejas de alto tenor en torno a que el sanedrín presidencial se está convirtiendo en una barrera impasable para que el jefe de Estado pueda tener contacto directo con sus bancadas. La molestia ha llegado a tal grado que varios representantes a la Cámara y uno que otro senador ya le han enviado mensajes al mandatario, por intermedio de ministros y algunos altos funcionarios, sobre la necesidad de reconstruir las relaciones con la bancada petrista en general.
“NO NOS COMPLIQUEMOS” (I). Y hablando del Pacto Histórico, con esa expresión le respondió un parlamentario de esa coalición a un periodista de EL NUEVO SIGLO que le preguntó si la bancada apoyaba de manera cerrada el proyecto de la senadora Isabel Zuleta que plantea la posibilidad de la reelección presidencial. El congresista, en charla 'off the record' con este diario, indicó que respetaba mucho la postura de la senadora Zuleta y que le asistía toda la razón en cuanto a que muchos de los que hoy se oponen a la reelección, alegando que afectaría la institucionalidad, fueron los más entusiastas a la hora de viabilizar esa opción a Uribe y luego respaldaron la de Santos.
“NO NOS COMPLIQUEMOS” (II). “... No nos compliquemos ahora... El propio presidente Petro ha dicho que no está interesado en la reelección y que su prioridad es la continuidad del gobierno del cambio... No podemos ser ‘más papistas que el papa’ ni tampoco seguir dándole papaya a la oposición de ver cómo, de un lado, hay gente de la bancada proponiendo una reforma de fondo como la reelección, y por otro, el ministro del Interior diciendo que eso no es ninguna prioridad ni iniciativa del Gobierno", puntualizó el congresista consultado.
NO PASARÍA. A propósito del proyecto de acto legislativo que presentaron esta semana más de 50 senadores y representantes proponiendo que la composición del Congreso y de otros cuerpos colegiados de origen popular tenga paridad de género obligatoria, un exmagistrado de la Corte Constitucional le dijo a un periodista de EL NUEVO SIGLO que “revisada la jurisprudencia sobre ese tema”, difícilmente un proyecto así pasaría el examen de exequibilidad del alto tribunal.
AL TABLERO. Los ministros de Hacienda, Ricardo Bonilla, y de Comercio Exterior, Luis Carlos Reyes, así como el director de la DIAN, Jairo Orlando Villabona, serán citados al Senado para que expliquen la intención gubernamental de aumentar los aranceles para los vehículos que se importan desde Brasil. Esa posibilidad ya prendió las alertas en la industria automotriz y los gremios en general por considerar que no hay una base técnica y objetiva para proceder en esa dirección, que tendría un alto impacto en los precios, así como en la oferta y demanda de vehículos a nivel nacional.