El factor mexicano que empieza a preocupar en Colombia | El Nuevo Siglo
Los mandatarios de México y Colombia se reunieron el pasado 1 de octubre, durante la posesión de la primera en la capital manita. /Foto presidencia.gov.co
Viernes, 11 de Octubre de 2024

DE LA CALLE Y CAMPANAZO A MÉXICO (I). El senador y exvicepresidente Humberto de la Calle le envió una carta al embajador de México en Colombia en torno al pronunciamiento de la mandataria de ese país, Claudia Sheinbaum, ofreciéndole respaldo al presidente Petro luego de que este denunciara que, por cuenta de la investigación formal que le abrió a su campaña de 2022 el Consejo Nacional Electoral, estaba rompiendo el orden institucional en nuestra nación y abriendo paso a un golpe de estado. “… Respecto a lo primero, la solidaridad, me parece perfectamente entendible en el plano humano, no solo por compartir los cargos de los más altos funcionarios de las dos naciones, sino porque existen nexos de vieja data entre ellos. Pero lo segundo genera preocupaciones”, indicó el congresista.

DE LA CALLE Y CAMPANAZO A MÉXICO (II). “Es cierto que esa es la versión de nuestro presidente. Pero la presidenta Sheinbaum al dar su declaración no advirtió que frente a ella hay pronunciamientos de la Corte Constitucional, del Consejo de Estado y del propio Consejo Electoral que, si bien pueden ser materia de discusión, muestran a las claras que la teoría del golpe de estado se aleja de la realidad o, al menos, de las convicciones de millones de colombianos. La presidenta no es una ciudadana cualquiera. Su propia condición implica que ella habla a nombre del Estado mexicano, Estado que se ha caracterizado por la defensa superlativa del principio de no intervención”, señaló la misiva.

DE LA CALLE Y CAMPANAZO A MÉXICO (III). El senador, exvicepresidente, exministro, exembajador y constitucionalista colombiano, en su carta al representante diplomático del país centroamericano, puntualizó que “respetuosamente sugerimos que, si México va a romper esa tradición y se va a ocupar de nuestros problemas internos, se asegure de mirar con equilibrio las diversas complejidades de un tema tan importante, examinando no solo las opiniones diversas, sino también la conducta de nuestras instituciones que creemos logrará superar las actuales vicisitudes”.

PETRO Y LA RUTA DE AMLO (I). Y hablando de los gobiernos izquierdistas de México, tanto el del expresidente Andrés Manuel López Obrador como el de su sucesora Sheinbaum, y sus nexos políticos e ideológicos con el presidente Petro, un reconocido analista político colombiano advertía esta semana que sí era “peligroso” que nuestro país copiara reformas ‘manitas’, como la recién aprobada para la elección popular de jueces y magistrados, más riesgoso era que la Casa de Nariño tratara de imitar algunas de las iniciativas del ajuste económico y estatal que dejó en marcha AMLO, sobre todo en cuanto a la oficialización de empresas mixtas, la anulación de instancias de control y las que buscan sacar al capital privado de sectores estratégicos como el energético, servicios de internet y mercado del litio, entre otros.

PETRO Y LA RUTA DE AMLO (II). “… La cruzada contra la participación de privados en el sector energético y otras empresas claves del sistema productivo, que dejó en marcha López Obrador en un paquete de proyectos que Sheinbaum también apoya y ya empezó a ser aprobado por un Congreso de mayorías de Morena (izquierda), no solo echa para atrás una reforma de 2013, proyectada por un gobierno de centroderecha como el de Enrique Peña Nieto, sino que es similar a los planteamientos radicales de Petro en transición energética, control estatal de servicios esenciales públicos y debilitamiento de instancias de control autónomas… Si Petro ya planteó copiar la elección popular en la justicia, le aseguro que en algunas semanas planteará un modelo de reforma energético similar al planteado por AMLO…”, precisó el analista en diálogo off the record con este Diario.

GRAVE ACUSACIÓN. En un mensaje en su cuenta X y bajo el título “Investigación”, el exsenador petrista y actual director del Departamento de Prosperidad Social, Gustavo Bolívar, publicó un gráfico sobre la evolución de la inflación en los últimos años frente a las tasas de interés de referencia que fija el Banco de la República. “… Observen cómo durante el gobierno Duque las tasas de interés fijadas por Banrepública estuvieron por debajo de la inflación, pero en el de Petro se mantienen varios puntos por encima, afectando el crecimiento e impidiendo el despegue económico del país. RT Golpe blando económico. En agosto de 2022, cuando entregó Duque, las tasas estaban al 9% con una inflación de 10,8%. Hoy las tasas del Banrepública están al 10,25% con una inflación del 5,8%. Es un total descaro. No les conviene que a la economía le vaya mejor. Aquí quedan en evidencia”, sostuvo Bolívar.

DELIRIO E IRRESPONSABILIDAD. Frente a ese pronunciamiento un experimentado economista que hizo parte del equipo económico del Ministerio de Hacienda en el gobierno Duque le indicó a EL NUEVO SIGLO que “… lo afirmado por Bolívar es una oda al delirio y la irresponsabilidad, no en materia de interpretación de los hechos macro y micro de la economía, ya que hay ópticas y criterios con los que uno puede estar de acuerdo o diferir, sino en cuanto a la ignorancia de los elementos más básicos y fundamentales de la economía… Preocupa semejante “investigación”, no de Bolívar como persona, sino de un alto funcionario cuya entidad maneja billones de pesos al año… Claro, el gerente ni la Junta Directiva del Emisor van a contestar algo tan insólito, pero le aseguro que el tema no les generará risas, sino preocupación”.

EMPUJÓN POLÍTICO (I). La forma en que el presidente Petro ha reaccionado a la investigación formal que la abrió el CNE a su campaña de 2022 por presunta violación de los topes electorales de financiación, no solo es bien vista por el Pacto Histórico y los sectores de la centroizquierda, sino que, según algunos dirigentes de esas toldas, cayó “como anillo al dedo” para impulsar la estrategia de crear un partido único que defienda las banderas petristas en las parlamentarias y presidenciales de 2026.

EMPUJÓN POLÍTICO (II). Según trascendió, Petro estaría buscando polarizar de nuevo al país político, así como a la opinión pública, dividiendo a la población y a la clase dirigente entre los que están con él o contra él. En este escenario de maniqueísmo político se le complica el margen de acción para algunos sectores de izquierda que, ante la impopularidad del actual jefe de Estado y la tempranera puja de precandidatos presidenciales en esas toldas, habían empezado a tomar alguna distancia de las directrices gubernamentales y, sobre todo, de la intención de crear un partido único para 2026, proceso en medio del cual ya se nota un codo a codo de algunos parlamentarios y dirigentes por posicionarse lo mejor posible y dejar en segundo lugar, o anular, a otros.