Ahora que el expresidente César Gaviria volvió a tomar las riendas del liberalismo, crecen las hipótesis sobre lo que será el futuro político de su hijo. En el marco del congreso liberal del jueves y viernes pasados, en la capital del país, varias alternativas se pusieron sobre la mesa. De un lado, que el exparlamentario y ex director de Planeación Nacional podría terminar recalando sorpresivamente en la lista al Senado de su partido. Pero también se escucharon versiones que apuntaban a que Simón Gaviria podría ser una carta roja para la próxima contienda por la Alcaldía de Bogotá. Y no faltaron los que indicaron que, salvo que gane el uribismo, sería seguro candidato a ministerio o embajada en el próximo gobierno.

La dura acusación de Martínez

Mucho eco sigue teniendo la dura acusación que hiciera el fiscal general Néstor Humberto Martínez, el miércoles pasado en las comisiones Primeras conjuntas de Senado y Cámara, en torno a que los ‘micos’ que había en el proyecto de la ley estatutaria que reglamenta la Jurisdicción Especial de Paz (JEP), aparecieron en el trámite del articulado entre el Ministerio del Interior y la secretaría de la Comisión I del Senado. “… Me extraño que el ministro (del Interior, Guillermo) Rivera no saliera a replicar de forma contundente la afirmación de Martínez… Otro ministro se hubiera ‘salido de los chiros’ con esa acusación”, precisó un senador liberal.

Los afanes de los partidos

En medio de la ‘rebelión’ de Cambio Radical contra el proyecto de ley estatutaria que reglamenta la JEP, varios parlamentarios de esa colectividad descartaron que la decisión de no votar esta iniciativa significara la oficialización de un posible “divorcio” entre el presidente Santos y su ex vicepresidente y hoy candidato presidencial por firmas, Germán Vargas Lleras. “… Lo que pasa es que en La U y los liberales no piensan sino en puestos y todos los días buscan cómo forzar un rompimiento definitivo entre Santos y Vargas”, dijo uno de los senadores de Cambio Radical a varios reporteros políticos en charla rápida e informal.

Reformar reglamento de todas maneras

Aunque el cuestionado magistrado Gustavo Malo pidió, y le fue aprobada por el pleno de la Corte Suprema de Justicia, una licencia no remunerada de dos meses, lo cierto es que varios juristas de ese alto tribunal consideran que si bien constituyó un “alivio” la decisión tomada por el togado (señalado de hacer parte de una presunta red de corrupción de compraventa de fallos y decisiones procesales), no puede abandonarse la idea de reformar el reglamento interno de la corporación. Según varios magistrados, como no se sabe si habrá otros involucrados en el escándalo, sería bueno reformar el reglamento para forzar que cualquier nuevo jurista que sea señalado formalmente pueda ser apartado precautelativamente del cargo mientras que se surte todo el proceso en su contra.

Fin de año sin embajador

Tal como avanzan las cosas, es muy posible que este año Colombia termine sin embajador titular en Venezuela. Como se sabe, desde marzo pasado, luego del agravamiento de la crisis política e institucional en la vecina nación, la Cancillería colombiana llamó a consultas al embajador Ricardo Lozano y desde entonces no ha ordenado su regreso, por estar condicionado a que el régimen de Nicolás Maduro reinstaure el violentado orden democrático y constitucional. Incluso semanas atrás se especuló en los corrillos políticos con que Lozano estaría pensando, ante su larga estadía en Colombia, en renunciar, rumor que no pasó de ahí… Lo que sí parece, por el momento, es que el régimen de Maduro no tiene pensado romper relaciones con Colombia, como se dijo meses atrás en Caracas.

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