Una obra llena de disciplina, emoción y respeto por la mujer será exhibida a partir del 3 de septiembre en la galería Beatriz Esguerra Arte. Se trata de la exhibición Versus de la artista plástica Carolina Convers, la misma que ha convertido sus obras en su propia voz, su vocación y, más que su vida, su ser. 

Su ideología artística  es catalogada como un proceso permanente de búsqueda, exploración y encuentro.  De este modo aparecen las mujeres de Carolina Convers, esas que la sorprenden a ella como artista y que sin duda atrapan a toda persona que las descubre y las aprecia entre los colores brillantes, los acetatos, las resinas y la pintura.

La muestra que estará disponible para el público hasta el 23 de septiembre fue bautizada como Versus, siendo la continuación de un largo proceso que se ve marcado en cada una de sus exposiciones, pues Convers desde sus inicios está en la búsqueda de su propia identidad, por eso trabaja las figuras femeninas, inspirada en las mujeres de su vida.

“En cada una de las figuras femeninas que construyo busco hallarme a mí misma y a cada una de las mujeres importantes en mi vida, como mis primas y mamá que siempre han estado a mi lado apoyándome”, explicó a EL NUEVO SIGLO Carolina Convers.

Convers, con disciplina, crea sus obras para ella, pero espera con emoción poder compartir con el público todas sus protagonistas, sus mujeres, hablar de su trabajo y recibir preguntas… esas que no sabe si podrá responder en su totalidad, pero que está segura que tienen una historia propia y una única versión para cada espectador.

Se inspira en la vida, en lo que ha vivido, en el mundo en el que vive, en tantas reflexiones sobre la existencia de los seres humanos y de las mujeres en este planeta y esta sociedad.  No considera que haya un discurso político reaccionario en su trabajo, siente que es una actitud de impotencia. No lanza un mensaje, se declara “no activista”.

“No intento dejarle un mensaje al público que se acerque a ver mis obras. Yo busco en cada uno de mis trabajos plasmar mis pensamientos, el proceso evolutivo y artístico que he desarrollado con los años, pues siempre busco mejorar para poder alcanzar la importancia y consideración que han tenido grandes figuras eruditas del arte como Doris Salcedo”, comentó Convers.

Manifiesta que “cada obra es una  composición diferente.  Lo que se ve en mi obra es autorreferencial, las fotos del álbum familiar son como mis herramientas. La construcción de mis piezas tiene todos los días cambios progresivos por el mismo proceso creativo, no estoy recreando el pasado para nada”,  y cuando se le pide que califique su propio trabajo como conceptual, surrealista posmoderno, neo-abstracto o Pop, ella lo resume en una sola palabra: “vanguardista”.

“Esta exposición fue construida con acetatos de algunas obras que hice durante el tiempo que viví en México pero que nunca fueron enmarcadas o incluidas en una exposición, pero que al igual que en las piezas de Versus, trabajamos el tema de la mujer. Pero lo que me llevó a deshacer ya el trabajo hecho e incluirlo en el nuevo, es el color, puesto que mis obras fueron caracterizadas durante algún tiempo como monocromáticas, pero en esta nueva puesta en escena rompo con esa etiqueta y la ausencia de la luz”, puntualizó la artista.