Las autoridades de Colombia esperan la liberación "en las próximas horas" de un funcionario de la ONU que fue secuestrado por disidentes de la guerrilla FARC, informó este viernes el ministro de Defensa, Luis Carlos Villegas.
Una "comisión" salió a la zona del sureste del país donde fue secuestrado el miércoles el funcionario de Naciones Unidas "a esperar el regreso de este colombiano", dijo a periodistas Villegas sobre el rapto, que coincidió con la llegada a Colombia del Consejo de Seguridad de la ONU en pleno para respaldar el pacto de paz con las FARC.
"Confiemos en que en las próximas horas podamos tener la noticia de que ya está en manos de esa comisión", añadió el ministro de Defensa, detallando que el grupo designado la víspera para recibir al funcionario secuestrado no pudo lograr su cometido ni pernoctar en el lugar "por razones logísticas".
"En el sitio no hay comunicaciones, es un sitio muy apartado y difícil", dijo Villegas sobre la localidad de Barranquillita, en el departamento de Guaviare, donde se encontraba laborando el miércoles el funcionario de la oficina de la ONU contra la Droga y el Delito (ONUDC) cuando fue secuestrado.
La identidad del trabajador no ha sido revelada, pero sí que su misión en el lugar era participar de una reunión con campesinos para promover la sustitución de cultivos de uso ilícito.
Colombia, principal cultivador mundial de coca, con 96.000 hectáreas, y mayor productor de cocaína, con 646 toneladas en 2015, según la ONU, apuesta a implementar el acuerdo de paz con las FARC para poner fin a medio siglo de confrontación, combatir el narcotráfico y generar desarrollo en zonas cocaleras.
"Esperemos que la comisión que salió esta mañana pueda regresar con el funcionario a salvo", añadió Villegas sin especificar si los miembros de ese grupo son los mismos líderes comunitarios designados la víspera para buscar al secuestrado.
Las autoridades, que esperaban que el hombre fuera dejado en libertad el jueves al mediodía, han coordinado las labores de liberación desde el municipio de Miraflores, cercano a Barranquillita.
El secuestro fue perpetrado horas antes de que los miembros del Consejo de Seguridad llegaran al país para apoyar el pacto de paz firmado en noviembre con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas), y que la ONU considera "irreversible".
Este viernes, la comisión del Consejo de Seguridad visitaba uno de los 26 puntos del país donde se encuentran concentrados unos 7.000 guerrilleros para dejar progresivamente sus armas en manos de la ONU, en cumplimiento del pacto de paz.
Existen, sin embargo, disidentes de la guerrilla que actúan como un grupo armado organizado, rechazan el acuerdo y siguen en el narcotráfico.