Así va el pulso por próximas presidencias de Senado y Cámara | El Nuevo Siglo
Mientras para la presidencia del Senado los conservadores decidirán entre Juan Diego Gómez y David Barguil, en la de la Cámara hay una baraja de ocho congresistas, en la que se encuentran Jennifer Arias y Ricardo Ferro. /Diana Rubiano, archivo ENS y cortesía
Foto Diana Rubiano, archivo ENS y cortesía
Sábado, 20 de Febrero de 2021
Redacción Política

En menos de un mes los congresistas reanudarán las sesiones ordinarias del segundo tramo de la tercera legislatura. Hay una amplia agenda legislativa en ciernes pero la atención parlamentaria también estará centrada en dos asuntos de mecánica política: el arranque de la campaña para los comicios de marzo de 2022 y la conformación de las mesas directivas de Senado y Cámara para el cuarto y último año de este cuatrienio.

De hecho, desde hoy empiezan a correr cinco meses para que se instale la última legislatura y se concrete la consiguiente votación para los nuevos timoneles de ambas cámaras.

Hasta ahora todo parece indicar que los acuerdos políticos suscritos el 20 de julio de 2018 se cumplirán también en esta ocasión, salvo un roce entre liberales y conservadores, que aún no se sabe si pasará a mayores. Pero en general, no hay a la vista nada de fondo que amenace lo pactado: en este último turno la presidencia del Senado le corresponde al Partido Conservador y la de la Cámara al Centro Democrático.

Puja azul

El primero en lanzarse al cargo por la bancada conservadora fue el antioqueño Juan Diego Gómez. Sin embargo EL NUEVO SIGLO conoció que el cordobés David Barguil también aspiraría y se estaría moviendo fuerte para lograr los apoyos necesarios.

A finales del año anterior el senador Gómez, actual presidente de la Comisión Segunda, le manifestó a su bancada la intención de aspirar y con ese propósito conversó por separado con cada uno de los otros 12 senadores que tiene la colectividad, la mayoría de los cuales inicialmente le manifestó su apoyo.

Luego de que Gómez se lanzara, se conoció la aspiración del risaraldense Juan Samy Merheg, pero esta se disolvió muy pronto. A renglón seguido, Barguil habría iniciado también un acercamiento con los compañeros de bancada, diálogo en el que algunos senadores le habrían dicho que ‘llegó tarde’ pues ya se habían comprometido con Gómez. Pero otros no habrían descartado apoyarlo.



Fuentes conservadoras consultadas por este Diario indicaron que si la elección fuera hoy, el ganador sería Gómez.

Como se dijo, hasta ahora los acuerdos de rotación de mesa directivas en el Senado se han cumplido, pues las colectividades han votado por el nombre postulado por la bancada a la que le corresponde ocupar la dignidad. Así, la primera legislatura la ostentó el Centro Democrático con Ernesto Macías, en la segunda estuvo el Partido Liberal con Lidio García y en la actual se desempeña Cambio Radical con Arturo Char.

Sin embargo, un roce entre liberales y conservadores por la representación del Congreso en el Parlamento Andino podría poner en peligro el apoyo a la carta conservadora.

Como se recuerda, en noviembre pasado, directivas del partido Liberal le manifestaron al presidente del Directorio Nacional Conservador, Omar Yepes, a través de una carta, que “nuestra bancada de Senado, en adelante y por decisión de la Dirección Nacional, quedará en libertad en lo que corresponda a la elección y conformación de mesas directivas del Senado de la República, sin ninguna obligación de votar por el conservatismo para la presidencia del Senado en el último año de la legislatura”.

Sin embargo, la verdad sea dicha, hasta ahora no hay ninguna noticia de que el liberalismo esté buscando desconocer los acuerdos o lanzar una candidatura alternativa a la conservadora. En realidad, este tipo de rebeliones suele ser frecuente en la última legislatura de los cuatrienios pero otra cosa es que prosperen.

Codo a codo uribista

Mientras los conservadores parecen manejar tranquilamente la definición de la presidencia del Senado, en la Cámara la situación es un poco más complicada, porque son ocho los representantes uribistas están aspirando a ocupar esa dignidad.

Se trata de una baraja con mucha diversidad regional, pues están el tolimense Ricardo Ferro, la llanera Jennifer Arias, el opita Álvaro Hernán Prada y el risaraldense Gabriel Jaime Vallejo. Pero también suenan los representantes por Bogotá, Juan Manuel Daza, Enrique Cabrales, Edward Rodríguez y Gabriel Santos.

La decisión sobre cuál será el nombre que se postule al cargo corresponde por votación a los 32 integrantes de la bancada de la colectividad en esta corporación, sobre la base de mirar la historia de cada uno de los candidatos, el trabajo político y lo que representa para el partido. Y, obviamente, para tomar esta decisión también es determinante el guiño del expresidente Álvaro Uribe, jefe natural de esas toldas.



La bancada en Cámara del Centro Democrático no se ha reunido en lo que va de este año, pero fuentes uribistas le indicaron a este Medio que se contempla hacerlo en los próximos 15 días. Ese cónclave sería para analizar la agenda legislativa en cuanto a los proyectos que se van a presentar a partir de marzo próximo, así como los énfasis y respaldos que vienen en trámite. Pero ya se sabe que allí también se hablará sobre la escogencia de la persona que postularán a la presidencia de la Cámara en la última legislatura.

Fuentes uribistas señalan que en ese grupo de congresistas sobresalen Ferro y Arias, por la activa participación en las comisiones donde tienen asiento (quinta y séptima, respectivamente) y la plenaria de la Cámara, tanto en proyectos propios y de la bancada o la coalición, como en debates de control político y otras intervenciones parlamentarias.

Además, destacan su reconocimiento por parte de sus compañeros de bancada, como en las otras colectividades.

Sin embargo, desde el año anterior el nombre que ha sonado con mayor fuerza en la bancada es el de Rodríguez, en parte como un reconocimiento a que obtuvo la mayor votación en el partido para la Cámara en las elecciones de 2018, con 104.000 votos. De haberse presentado al Senado en esa oportunidad le hubieran sido suficientes para alcanzar un escaño e incluso ubicarse detrás, aunque lejos, de los 875 mil votos del expresidente.

También Rodríguez se hizo muy visible por su papel como integrante de la Comisión de Acusación de la Cámara en la investigación al magistrado Gustavo Malo y al extogado Leonidas Bustos por el llamado ‘Cartel de la Toga’, que terminaron con la acusación en los dos casos ante el Senado, al determinarse que estarían involucrados en este episodio de corrupción que se presentó en la Corte Suprema.