El Juzgado I Promiscuo Municipal de Malambo, Atlántico, ordenó al Inpec trasladar al empresario Emilio Tapia, de la cárcel La Picaleña en Ibagué a la cárcel El Bosque de Barranquilla, al darle razón a una tutela interpuesta por su esposa, Natalia Morales, quien aseguró que se le estaban vulnerando los derechos a la unidad familiar.

El empresario, investigado por el escándalo del Mintic y Centros Poblados, estaba recluido en Ibagué, cuando se interpuso la acción de tutela, donde su esposa manifestó que sus dos hijos menores de edad no podían visitarlo y con esto se estaba “vulnerado sus derechos a la unidad familiar, igualdad y dignidad humana”.

Asimismo, argumentaron que en Barranquilla también habían establecimientos carcelarios con suficiente seguridad. 

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Una vez el juez estudió la tutela, accedió a darle la razón y solicitar el traslado.

“Respecto del derecho al arraigo familiar. Aun cuando el traslado del hoy accionante, según lo indicado, responde objetivos legítimos, no indica el motivo por el cual se le ubica en un lugar de detención que, a la postre, genera más distancia y lejanía de su núcleo familiar”, dice un apartado de la decisión del juez.