EN APLICACIÓN de una nueva Ley, el gobernador de Florida y precandidato por la nominación republicana, Ron DeSantis, informó este miércoles que allí no serán válidas las licencias de conducción expedidas en otros cinco Estados que, generalmente, las expiden sin restricción alguna a personas que residen ilegalmente en Estados Unidos.

“Alguien que se encuentra ilegalmente en nuestro país y ha violado nuestras leyes no debe poseer una identificación emitida por el gobierno que le permita acceder a los servicios financiados por el estado y otros privilegios otorgados a los residentes legales”, dijo el gobernador DeSantis. “La administración de Biden puede continuar abdicando de sus responsabilidades para asegurar nuestra frontera, pero Florida defenderá el estado de derecho. Incluso si el gobierno federal se niega, Florida actuará con decisión para proteger a nuestros ciudadanos, nuestro estado y nuestro país”.

De esta forma, con el comienzo de este mes, empezó a regir la invalidez de las licencias de conducción expedidas en Delaware, Hawai, Connecticut, Rhode Island y Vermont a conductores que no tienen su residencia en regla.

DeSantis, junto con el Departamento de Seguridad Vial y Vehículos Motorizados de Florida, creó la lista de licencias no válidas. Según la oficina del gobernador, la información sobre las mismas está sujeta a cambios a través de actualizaciones periódicas debido a que otros estados revisan sus requisitos de emisión de licencias de conducir.

El coronel de la Patrulla de Carreteras de Florida, Gary Howze II, también dijo que la SB1718 se trata de "seguridad y protección".

“Este proyecto de ley es sobre seguridad y protección. Cuando lo hacemos cumplir, nos aseguramos de que las personas con las que nos encontramos sean quienes dicen ser y que sean bienvenidos a disfrutar de todo lo que el estado tiene para ofrecer”, dijo Howze. “Nuestra prioridad es la seguridad pública y mantener seguras a nuestras comunidades. Estamos comprometidos con todo lo que podamos hacer para promover ese esfuerzo”.

A principios de este año, DeSantis promulgó la ley SB1718, que según el gobernador es la “legislación contra la inmigración ilegal más fuerte del condado”. La nueva ley prohíbe la emisión de una licencia de conducir a cualquier persona que no proporcione prueba de presencia legal en los EE. UU. y especifica que las licencias de conducir de otros estados emitidas exclusivamente a extranjeros ilegales no son válidas en Florida.