LA INSEGURIDAD en Norte de Santander tiene muchas variables, según Jairo Cristo Correa, representante a la Cámara por el partido Cambio Radical. Una de ellas es la presencia de grupos criminales que han sometido a los habitantes de distintos sectores del departamento.
Por lo mismo, destacó la importancia de desarrollar una fuerza de seguridad en la frontera, para reducir el delito en la región y, además, para contrarrestar los efectos negativos de la migración ilícita, sobre todo desde Venezuela.
EL NUEVO SIGLO: ¿Cree que el Eln va a cumplir alguna tregua hecha con el Gobierno después de lo que ocurrió en Arauca con el secuestro de una sargento del Ejército Nacional y sus dos hijos?
JAIRO CRISTO CORREA: Me parece que se están utilizando mecanismos que el país ya ha ensayado y ha fracasado. Cuando uno comienza a hacer lo mismo y los resultados han sido nefastos, podemos inferir que los nuevos resultados no van a ser efectivos.
Por eso, considero que los acuerdos con el Eln no van a arrojar ningún tipo de resultados positivos, pues es lo mismo que el país ha hecho durante todos los procesos de paz.
Si existiera una guerrilla ideológica, que piensa en fortalecer derechos del pueblo, los resultados en torno a las conversaciones con el Gobierno pudieran ser otros.
Pero si tenemos una guerrilla que solo está pensando en hacer daño, en no garantizar igualdades y que piensa en el narcotráfico para subsistir, creo que nunca va a parar.
ENS: ¿Cómo ve el incremento de los narcocultivos en zonas como el Catatumbo?
JCC: Vemos que la guerrilla ha ganado espacio, pues pelea no por ayudar a la gente, sino por un comercio. Así, buscan las maneras de ver cómo someten a las personas para lograr que trabajen para ellos. La guerrilla convierte a los pueblos del Catatumbo en esclavos para sus intereses.
ENS: ¿Cómo se ha venido desarrollando el tema de flujo ilegal de migrantes, principalmente desde Venezuela a través de los pasos fronterizos entre las ciudades de San Cristóbal y Cúcuta?
JCC: El flujo ilegal de migrantes es un fenómeno que siempre se ha dado. Colombia es un país sin una política migratoria robusta. Nosotros los colombianos éramos los que salíamos del país por temas de violencia. Colombia es un país que era de migrante y hoy es un país receptor.
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En el pasado gobierno se desarrollaron programas de integración y salud para que los migrantes pudieran tener un sistema de seguridad social, lo que me parece muy positivo.
Este gobierno, por el contrario, ha abandonado el tema de la seguridad social de los migrantes, generando una deuda descomunal en la red pública del departamento de Norte de Santander. Considero que debemos hacer una política migratoria que no se trate de cerrar puertas, sino de saber quién entra a la casa.
Seguridad fronteriza
ENS: El gobierno de Gustavo Petro y el régimen de Nicolás Maduro afirman que están coordinando políticas para garantizar la seguridad fronteriza, ¿qué puede decir en torno a eso?
JCC: El gobierno de Venezuela no está interesado en permitir la integración civil de ciudadanos tanto venezolanos como colombianos. Están mirando cómo incrementan sus negocios de narcotráfico. Definitivamente, la seguridad fronteriza no es de su interés.
ENS: ¿Cómo están trabajando para resolver el tema de inseguridad en Norte de Santander?
JCC: La inseguridad tiene muchas variables. Una de las principales es el tema de la migración. Como ya he dicho, no sabemos quién entra ni quién sale. No estamos diciendo que les cerremos las puertas a los migrantes, sino que sepamos quiénes y a qué vienen.
El segundo punto está relacionado a las políticas públicas que el Gobierno colombiano le ha dado a la zona de frontera, las cuales no han sido las mejores.
Además, no se fomenta la formación de empresas. En el pasado, el gobierno, a través del Plan Nacional del Desarrollo, con la ley 1955, en su artículo 268, establecía la Zona Económica Especial, que iba a permitir que las empresas interesadas pudieran asentarse en zonas de frontera y tener beneficios tributarios.
A este gobierno le pareció que esa no era la manera y no está dándoles un trato especial a zonas de frontera como Cúcuta. Considero importante una reactivación de los emprendimientos y empresas local para generar empleo. Es que el principal problema de inseguridad en nuestra ciudad está relacionado con la falta de empleo.
Otro tema es que hace falta más pie de fuerza. Es importante tener una fuerza especial migratoria, a nivel de Policía o a nivel de Ejército, para generar mayor seguridad en Cúcuta.
Policías
ENS: ¿Cuántos funcionarios policiales requiere Norte de Santander para luchar de manera efectiva en contra de este flagelo que es la inseguridad?
JCC: La Policía Nacional no puede seguir ejerciendo actividades de tránsito en la ciudad de Cúcuta. Los funcionarios solo realizan temas relacionados con este tema, como la verificación de documentos de los conductores. Por lo tanto, no están ejerciendo el papel que realmente les corresponde, que es el de velar por la seguridad de los ciudadanos.
Considero que la Alcaldía de Cúcuta debería terminar el convenio de tránsito para la policía y poner a hacer a la policía lo que le corresponde. Se requiere de más cuadrantes, mayor seguridad, una policía centrada en la comunidad, trabajando con las comunidades y a eso debemos apostar.
ENS: Sobre las alertas por injerencia de grupos irregulares que ha hecho la Misión de Observación Electoral (MOE), ¿cómo está el panorama en Norte de Santander?
JCC: Creo que el panorama para todos los candidatos en Norte de Santander a las diferentes corporaciones públicas como asambleas y alcaldías, es de mucha zozobra. Ha pasado mucho que, con el tema de los cilindros bombas o explosivos, se está generando mucho miedo y no permite una democracia participativa, pues la gente tiene miedo, ya que no quiere asistir, por ejemplo, a una reunión pública porque no sabe qué le va a pasar.
El plan democrático que se está desarrollando en el país debe tener una connotación especial para las zonas de frontera, como el acompañamiento a candidatos y a la gente, para que puedan sentirse seguros.