Hasta ahora, por historia y por lo hecho a lo largo del torneo, todos los caminos conducen a que Brasil conquistará su octavo título en la Copa América Femenina y que Colombia será por tercera vez subcampeón.
Invicta, con 19 goles marcados y ninguno recibido, la ‘verdeamarela’ ha impuesto su poder frente a sus rivales, salvo ante Paraguay al que solo le pudo marcar dos goles.
Sin embargo, en la final de la Copa se encontrará este sábado a partir de las 7:00 p.m. en el estadio Alfonso López de Bucaramanga con una Selección Colombia motivada, que quiere seguir haciendo historia y demostrando que ya es hora de que el fútbol femenino tenga un verdadero torneo rentado.
El onceno dirigido por Nelson Abadía ha aprovechado estos días para trabajar pensando en lo que será el duelo frente a la súper favorita a llevarse el trofeo.
Ayer, en el Colegio San Pedro Claver entrenó a puerta cerrada, diseñando la estrategia para contrarrestar el poder ofensivo de su adversaria y buscando encontrarle alguna fisura que permita hacerle daño.
Tanto Abadía como sus jugadoras saben que Colombia debe tener mucho cuidado con los contragolpes, que son una de las virtudes de las dirigidas por la sueca Pia Sundhage.
“Hay que saber aprovechar las oportunidades que tengamos porque sabemos que a veces se nos cierra el arco, pero creo que en esta final vamos a tener esa contundencia todas las jugadoras y podremos hacer esos goles”, expresó la defensora Mónica Ramos a periodistas.
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Añadió la jugadora que milita en el fútbol brasileño que “sabemos que es un rival duro, sabemos el potencial que tiene Brasil, pero nosotras también tenemos una buena selección. Nos hemos preparado para eso (el partido). La idea es hacer las cosas de la mejor manera y quedar campeonas en nuestra casa”.
Brasil, que ha ganado siete de las ocho ediciones de la Copa, y Colombia, cuyo máximo logro ha sido el segundo puesto en 2010 y 2014, se enfrentarán de nuevo en Bucaramanga.
Por el momento, Suramérica definió a las finalistas como sus dos representantes en los Juegos Olímpicos de 2024, que tendrán lugar en París.
Brasileñas y colombianas también aseguraron un cupo al Mundial de 2023. Un tercer boleto a la máxima cita de la categoría será disputado mañana entre Paraguay y Argentina. El perdedor de este último duelo irá junto a Chile a la repesca del Mundial.
La Roja, por ser local, Argentina, Paraguay y Venezuela estarán en los Juegos Panamericanos de Santiago-2023.
No hay que olvidar que ambos seleccionados disputaron en cuatro ocasiones el trofeo, todas ellas en cuadrangular final.
Todo comenzó en 2003, cuando avanzaron a la ronda definitiva con Argentina y Perú, en ese momento la campeona fue Brasil y subcampeona las 'gauchas', mientras la 'tricolor' terminó tercera.
Pasaron siete años para que las ‘superpoderosas’ pelearan una Copa América con mayor nivel, que fue en la edición de 2010 en Ecuador, cuando el seleccionado que lideraban Catalina Usme y Yoreli Rincón acabaron en el segundo puesto, detrás de las ‘canarinhas’.
Ese mismo resultado se repitió para 2014, solo que tanto Colombia como Brasil llegaron a la última jornada del cuadrangular final con opciones de título, pero un empate sin goles le dio la gloria a la ‘verdeamarela’, que sumó siete puntos y el onceno patrio cuatro.
Finalmente, para Chile 2018 las brasileñas consiguieron su séptimo trofeo al ganar sus tres duelos de la fase final, mientras la tricolor solo sumó un punto y quedó última del grupo.
Colombia en esta Copa espera aprovechar su condición de local, el apoyo del público y, ante todo, la confianza que se tienen las jugadoras.