Con el propósito de solucionar el problema de las altas tarifas que se están cobrando por el servicio de energía eléctrica en la región Caribe, el presidente Gustavo Petro anunció que el gobierno va a tomar el control de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (CREG).

El mandatario aseveró en el Congreso de Andesco -que se realizó en Cartagena-, que un artículo de una ley hecha por el expresidente Iván Duque le permitiría a su gobierno asumir esas funciones dirigidas a mostrar la adecuación de un nuevo modelo en donde los sectores público y privado se puedan aliar.

“Tenemos un artículo de una ley hecha por Duque en su plan de desarrollo, él la pensó para su gobierno, que nos permite asumir las funciones de la CREG. Ese artículo lo vamos a usar. Queremos primero un espacio de diálogo, pero Duque nos habilitó y el Congreso de la República para asumir las funciones de la CREG. Esas funciones deben mostrar la adecuación de un nuevo modelo que hay que evaluar permanentemente, en donde lo público y lo privado se puedan aliar sabiendo que el servicio público es un instrumento para garantizar un derecho universal”, expresó.

El presidente Petro reiteró que no se van a estatizar los servicios públicos y a su vez anunció que entrará un nuevo componente para mejorar la prestación de la energía.

“Vamos a entrar un nuevo componente tanto en conectividad como en energía eléctrica y en agua potable. Ese nuevo componente se llama comunidad. Las comunidades energéticas son las generadoras de energía eléctrica, a las cuales hay que darles cabida en todo el territorio para hacer el tránsito hacia las energías limpias”, puntualizó.

Independencia

El Presidente pidió a la Superintendencia de Servicios Públicos Domiciliarios y a la CREG ser independientes del interés privado y garantizar los intereses generales y públicos de los colombianos.

“Necesitamos ese examen que la Superintendencia de Servicios Públicos debe realizar sobre este problema concreto y, en general, garantizar que esa Superintendencia sea Superintendencia pública y cuide el interés general en Colombia; y garantizar que las comisiones reguladoras sean para regular los mercados en función del derecho universal, no para firmar los procesos de especulación financiera, como hasta ahora lo ha realizado”, precisó el mandatario.

Precisó que este componente está planteado en su programa de Gobierno.

Economía popular

Posteriormente, el Presidente se trasladó en la misma ciudad al recinto donde se clausuraba el congreso de Confecámaras y afirmó que dos caminos son fundamentales para empoderar a la economía popular del país: la alfabetización digital y la promoción de la asociatividad libre.

El jefe de Estado defendió el concepto de la economía popular, que en el país soporta la mitad del trabajo, y que por una cuestión legal es definida como “informal”.

“La economía popular me parece mucho más decente, que decirle a media economía del país que no es legal, que es lo que hacemos con el concepto de informalidad. La economía popular puede tener formalidades, informalidades, pero allí está en realidad buena parte de los puestos de trabajo, la mitad; la inmensa mayoría por debajo del salario mínimo. Ahí está el fondo de la pobreza, el rebusque, como se dice popularmente”, declaró.  

El Presidente afirmó que, para darle impulso a la economía popular, hay que entrar en otra lógica, y es donde las cámaras de comercio tienen un papel que cumplir.

En cuanto a la alfabetización digital, aseguró que la economía debe llegar a este nivel, porque es una capacidad nueva que no existía hace 50 años, y los empresarios populares deben involucrarse de lleno en este campo y no quedar por fuera de los avances.

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Formalización

De otra parte, el presidente de Confecámaras, Julián Domínguez, reiteró el compromiso de la red de cámaras de comercio de promover la formalización empresarial, y señaló que 15% de las micro, pequeñas y medianas empresas incrementaron su tamaño en los últimos años, según un estudio del gremio.

Además, aprovechó la presencia del mandatario colombiano para proponerle que el Plan Nacional de Desarrollo de los próximos cuatro años se fije la meta de crear 400 mil nuevos empleos para jóvenes y aumentar en 1.000 millones de dólares la inversión extranjera.

Impacto de inflación

Durante el congreso de Confecámaras, el presidente de Asobancaria, Hernando José Gómez, analizó las diversas variables que presenta el país en materia económica para superar barreras que se tienen en materia fiscal y social.

En principio, Gómez analizó uno de los fenómenos más decisivos de estos días: la inflación.

“En 2023 el estimado es que logramos bajar a niveles del 5%, 6%. Quiere decir que solo hasta el año 2024 vamos a recuperar la senda del Banco República, que está entre 2% y 4%, y eso implica que el Banco de la República va a estar apretando las riendas hasta el año 2024. Además de que el viento de cola no va a estar del lado nuestro, también vamos a tener un Banco Central que tiene que hacer lo que tiene que hacer, que es controlar la inflación, y nos va a obligar a mantener unas tasas más del lado contractivo que de la expansión”, señaló el presidente del gremio bancario.

No obstante, el directivo resalta que este no es un fenómeno local, sino mundial, y que, a pesar de la situación, Colombia está en una mejor posición frente a la inflación que otras naciones de la región.

Explicó Gómez que “en América Latina estamos viendo, por ejemplo, que la inflación en Chile, que era nuestro referente para todos, está en 13,5%, o sea, realmente está súper elevado y lo curioso es que el país que más ha elevado su tasa de interés ha sido Brasil y es el único que ha logrado empezar a disminuir la inflación. Evidentemente aquí siempre se dice que el Banco de la República, si la política monetaria es un choque, ¿para qué sube las tasas de interés? Pero si fuera solo un choque de demanda sería mucho más fácil su control”.

Midiendo la productividad

El presidente de Asobancaria señaló que se debe enfocar en la productividad nacional, pues el choque externo genera una situación similar en los países de la región, generando una caída en la demanda generalizada, lo que enfriaría la actividad económica.

“Indudablemente, en la medida en que se recupere la producción del sector agrícola, entre otros, la restricción a la demanda que tiene que vencer el Banco de la República es mayor. Entonces aquí lo que estamos viendo es que tenemos esa situación donde todos los países de la región van a estar con tasas de interés relativamente altas”, sostiene Gómez.

En su exposición, el presidente de Asobancaria afirmó que “todo esto indica que el comercio que vamos a poder lograr será bajo, porque finalmente si tenemos una disminución en la demanda interna, esto no es extraño ya que así lo reflejan los mercados internacionales. Además, las actividades económicas de los países relevantes para Colombia también van a estar en una situación de relativa contracción en el corto plazo”.