Poner en marcha un plan a nivel transnacional en la región de Latinoamérica con el apoyo de Estados Unidos y la Unión Europea para hacer frente al narcotráfico en Ecuador, un problema que considera "nuevo" para el país, pidió el presidente Guillermo Lasso.
"Hace catorce años Ecuador era un país reconocido como país de tráfico que iba hacia Estados Unidos y Europa, pero en los últimos catorce años esto se ha incrementado y ha causado un problema nuevo, que es el consumo de drogas", sostuvo en un foro organizado por el diario 'ABC'.
Para Lasso, existe un "problema de seguridad pública y uno de salud pública". "El problema de seguridad requiere del apoyo de la región, de países como Colombia, Perú, Estados Unidos y también la Unión Europea" porque Ecuador "no puede luchar solo contra el narcotráfico y esta es una realidad nueva con la que se despiertan los ecuatorianos".
Así, insistió en que "sin el apoyo internacional no puede salir adelante", lo que lo ha llevado a plantear insistentemente un plan para Ecuador que "demande el respaldo de países amigos". El mandatario ha afirmado que existe en el país una "ausencia de Estado", algo que se está "supliendo con acciones concretas".
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"Al llegar al poder me encontré que casi un tercio del territorio ecuatoriano carece de control sobre vuelos irregulares. Ahora hemos elaborado la presencia de un radar para controlar al menos la mitad de ese tercio donde estaba ausente el Estado", sostuvo.
"Para marzo tendremos un control del 100 por ciento en lo referente al control aéreo de vuelos irregulares", matizó antes de asegurar que para ello es necesario "fortalecer el equipamiento para la intercepción de vuelos y una ley que autorice el derribo de vuelos cuando no acepten el control del Estado".
En este sentido, ha aseverado que para recuperar la presencia estatal es necesario un "Gobierno eficiente, uno que dé respuesta a las necesidades de los ciudadanos". "Una sociedad donde solo 1 de cada 3 ciudadanos tiene un empleo formal muestra la ausencia de un Estado o la presencia de gobiernos ineficientes que no fueron capaces de dar respuesta a las demandas de los ecuatorianos", ha dicho.
Por ello, ha considerado que existe un "desafío muy grande" y una "única respuesta posible", que es la "inversión privada y la ampliación de los mercados para los productos ecuatorianos". "Ecuador es un país dolarizado (...) no hay posibilidad de devaluación", ha sostenido.
Sobre el estado de excepción decretado en el país latinoamericano para combatir la reciente ola de violencia, delincuencia e inseguridad derivada del narcotráfico, Lasso ha hecho hincapié en que se trata de una respuesta "coyuntural a un problema de seguridad, no una solución final".
Lasso ha querido a su vez reconocer que España "para Latinoamérica" es una "puerta de ingreso a Europa, a un mundo desarrollado, de inversionistas". "Las relaciones de Ecuador con España han sido tradicionalmente muy buenas, lo siguen siendo hoy, no me cansaré de agradecer la acogida que tuvo una oleada migratoria de ecuatorianos que tuvo lugar a comienzos de este siglo", ha remarcado.
El presidente insistió en su intención de alcanzar un acuerdo de libre comercio con el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, para "luego pedir el acceso de Ecuador a la Alianza del Pacifico".