Cambio: solo si… | El Nuevo Siglo
Martes, 31 de Mayo de 2022

Necesitamos transformarnos, los cambios son urgentes, de ello no hay duda.  El cambio real tiene condiciones: las internas son las más importantes.

Quien está cómodamente instalado no percibe la necesidad de ningún cambio, el cual le resultaría amenazante y tratará de evitar a toda costa.  Si no ve la necesidad de cambio en una sociedad donde la pobreza ha crecido a pasos agigantados, donde la corrupción es monumental, donde la muerte ronda campante y la inequidad galopa rauda, donde la deforestación y el descuido por la tierra son más que evidentes, es que tiene puestas las vendas del ego y de niveles de consciencia bajitos, en los cuales solo prima el interés personal.  Sencillamente, no puede ver, su confort se lo impide.  Solo ve en riesgo sus privilegios, el resto es borroso paisaje. Ahí va.

¿Quién reconoce la necesidad de transformación? Quien ha vivido en carne propia el dolor de la exclusión -de la vida laboral, del sistema de salud, de la tenencia de tierra, de acceso a mercados, en fin, de una vida digna- o quien ha desarrollado una sensibilidad que le permite ser compasivo con las dificultades ajenas.

El cambio es imprescindible. Pero, no a cualquier costo. Para que un cambio fructifique afuera, primero ha de generarse adentro: la transformación individual es una condición sin equa non para que se den los cambios colectivos que necesitamos. Hoy puede ser un día de cambio, de un giro en la historia política de Colombia.  Pero, el cambio de afuera no se sostiene sin el cambio de adentro.

La transformación interior es la base para el cambio colectivo. Es por ello que necesitamos, más que dirigentes políticos, administradores públicos que estén en observación permanente de sus egos, porque el poder enceguece. Si el foco está puesto solo en los resultados de las encuestas y en los indicadores macroeconómicos, desestimando la necesidad de hacer trabajo interior, seguiremos con más de lo mismo, en versiones distintas. Si los administradores públicos que conformen el siguiente gobierno no están dispuestos a ampliar su consciencia, a seguir haciéndolo, la anhelada evolución será solo sueño. 

Por supuesto, los electores hemos de ser correspondientes con el cambio interior.  La primera transformación que necesitamos trabajar es la propia: las transformaciones sociales, para que cuajen, empiezan adentro, pues no son únicamente responsabilidad de los elegidos para representarnos, sino de todos los ciudadanos.

Nuestra tarea es estar mucho más conectados con nosotros mismos, para cumplir nuestras obligaciones y ejercer nuestros derechos. Necesitamos seguir transformándonos, sanándonos, amándonos. Si cambiamos adentro podemos sostener los cambios en el afuera. Si sabemos cómo transformar nuestro interior podremos exigir con más autoridad cómo transformar el afuera.  ¡Que la Consciencia Divina nos guíe!

@edoxvargas