Costo del postconflicto

Para 2012 el Presupuesto de defensa y seguridad nacional será cercano a 22 billones de pesos, es decir, 13% del mismo. Mas lo relevante del dato es que según el Conpes 3712, donde se definen los recursos de reparación de víctimas del conflicto en 2012, invertirán 6,1 billones.

Algunos hacen una matemática simple: se gasta más en defensa que en reparación. Si bien en términos generales la afirmación es cierta, lo que realmente ocurre es que el costo del posconflicto incluye un gran costo de mantenimiento de la seguridad lograda.Efectivamente, y como está demostrado en diversos conflictos, después de la fase de confrontación de las fuerzas irregulares con las institucionales, mantener la seguridad lograda y contener la creación de las bandas criminales es quizá más costoso que el enfrentamiento mismo, ya que requiere un mayor pie de fuerza y grandes inversiones en términos de seguridad urbana y aumento de presencia nacional.

Por esto es fundamental que hoy la sociedad colombiana comprenda que el gasto en defensa y seguridad no es un gasto de guerra sino un gasto de aseguramiento de la condición lograda, y este debe ser pensado en un largo período.

La reparación a las víctimas es un paso fundamental en el proceso de reconstrucción del país, pero es imposible que una víctima pueda volver a su tierra sin la presencia de la seguridad nacional, o de lo contrario simplemente en pocos años las condiciones serán peores porque el conflicto habrá resurgido con tintes más violentos por el fin de las ideologías en los grupos insurgentes y la búsqueda del poder y la riqueza en organizaciones criminales.

Quizá el costo de la guerra en Colombia ha sido enorme y más aún si hablamos del Presupuesto Nacional, mas es muy probable que debamos pensar que esos 50 años de financiación de la guerra requieran cerca de 50 años de financiación del aseguramiento de la paz.

Como ocurrió en diversos países de África y Centroamérica, el llamado postconflicto desembocó en un serio problema de bandas criminales sin ideología, al igual que está ocurriendo en Colombia, y esto deriva en una sensación de inseguridad diferente porque es urbana y afecta a 70% de la población y no a 30% que afectaba la insurgencia.

Obviamente es difícil decir que el conflicto acabó en Colombia, pero sí es claro que ya empezó el postconflicto, y debemos asumir que debemos reparar pero también financiar la paz.

Colombianada. Como siempre, nos sale más caro el remedio que la enfermedad.

@consumiendo