Siguiendo los pasos de la primavera, China entra en el tiempo anual de las "Dos Sesiones". Como uno de los acontecimientos más importantes en la vida política del país, las dos sesiones (Reunión anual de la Asamblea Popular Nacional y la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino) han atraído la atención del mundo, que espera de China la continuidad en la dirección del desarrollo de alta calidad, y mayores contribuciones a la paz y el desarrollo globales.
Se ha dado a conocer el desempeño de la economía china del año 2023: el PIB creció en un 5,2% para alcanzar los 126 billones de yuanes (aproximadamente 18 billones de dólares), de tal modo que China sigue siendo el mayor motor del crecimiento económico mundial, con una contribución cerca del 30%. El PIB per cápita supera los 12.000 dólares y el grupo de ingresos medios supera los 400 millones y sigue creciendo.
Se crearon 12,44 millones de nuevos empleos urbanos y la tasa encuestada de desempleo urbano del 5,2%. El IPC subió 0,2% y la renta disponible per cápita aumentó un 6,1%. Casi 300 millones de campesinos se han incorporado al proceso de urbanización, y la tasa de urbanización de la población permanente se incrementó al 66,2%. El valor añadido de la industria de servicios representó el 54,6% del PIB y el consumo contribuyó el 82,5% al crecimiento económico.
En medio de un contexto internacional adverso derivado de los conflictos geopolíticos, la economía china ha superado múltiples dificultades y desafíos, manteniendo un impulso de desempeño estable y positivo.
En promoción de una nueva industrialización, de nuevos formatos económicos, como la economía digital, China ya tiene más de 50% de usuarios de 5G. El año pasado, el país invirtió más de 3,3 billones de yuanes (cerca de 500 mil millones de dólares) en I+D, un aumento interanual del 8,1%. Las innovaciones en campos de vanguardia como IA, biomedicina y tecnología cuántica continúan acelerando.
La capacidad instalada de energía renovable alcanzó los 1.450 millones kW, superando a la energía térmica por primera vez, y la nueva capacidad generada durante el año ocupó más de la mitad del mundo. La producción y venta de vehículos de nueva energía representan más del 60% del total global, y las exportaciones de baterías de litio y productos fotovoltaicos aumentó casi 30%.
Según datos del Foro Económico Mundial, China cuenta con 62 de las 153 "fábricas faro" que representan el nivel más alto de fabricación inteligente y digitalización del mundo, ocupando el primer lugar. Palabras clave como "modernización al estilo chino" y "fuerzas productivas de nueva calidad" resaltan las características de nuestra economía: abierta, inclusiva, innovadora, eficiente, justa y sostenible.
Las principales metas de este año son: aumentar el PIB en alrededor de un 5 %; mantener la tasa encuestada de desempleo urbano en torno al 5,5%; contener el alza del IPC en torno al 3%; sincronizar el aumento de los ingresos de la población con el crecimiento económico; fijar el déficit fiscal en un 3%; y reducir el consumo energético por unidad del PIB en alrededor del 2,5%.
Lograr estos objetivos no va a ser fácil. China debe seguir profundizando la reforma y la apertura, combinar mejor el papel decisivo del mercado y el papel proactivo del gobierno, continuar estimulando la vitalidad social, para que el desarrollo de alta calidad pueda rendir nuevos y mejores resultados.
Como un ejemplo, China va a tener más políticas innovadoras para el comercio de servicios y el comercio digital, ampliar la importación, dar nuevas facilidades a los extranjeros para trabajar, invertir, estudiar y viajar en el país, avanzar en proyectos importantes de la construcción conjunta de alta calidad de "La Franja y la Ruta" , fortalecer la cooperación en los campos digital, verde, innovación, salud, turismo, cultural, reducción de la pobreza, promover el libre comercio y participar en la reforma de la OMC, en aras de construir una economía mundial abierta.
La primavera lleva esperanza para un nuevo impulso de desarrollo. Con el respaldo de una economía todavía vigorosa, a través de la iniciativa global de desarrollo y la Franja y la Ruta, China está dispuesta a compartir más oportunidades con el mundo, incluido Colombia, para aunar esfuerzos en la construcción de una comunidad de futuro compartido.
* Embajador de China en Colombia,