Colombia tiene importantes retos en materia económica. El crecimiento potencial de la economía apenas alcanza el 3% para 2030, el desempleo se acerca al 10%, hay preocupantes retrocesos en competitividad y la concentración de las exportaciones en materias primas alcanza el 70%.
Frente a esto urge una estrategia que promueva el crecimiento de la productividad y facilite un mayor uso de los factores productivos de nuestra economía. Se necesita una estrategia de desarrollo sostenible, que haga uso eficiente de los recursos naturales y que tenga como prioridad la conservación del medio ambiente y la biodiversidad. La alternativa a estos retos es el crecimiento verde.
Colombia es una potencia en términos de biodiversidad. Somos el país con mayor diversidad de aves y orquídeas del mundo y el segundo en diversidad de plantas. En nuestro territorio se alberga cerca del 50% de los páramos del mundo y el 10% de la fauna y flora del planeta. Solo en plantas y hongos hay registro de más de 36.000 especies según el SIB.
A la par de este enorme activo natural, existen importantes industrias y un mercado creciente que, a través del uso sostenible de la biodiversidad, tienen la oportunidad de desarrollar productos y servicios con la posibilidad de mejorar la productividad y diversificar la oferta exportable. La industria farmacéutica, la cosmética y los mercados verdes son ejemplo de ello.
Tanto la industria cosmética como la farmacéutica han sido seleccionadas como sectores estratégicos para el desarrollo productivo nacional. No es para menos, las ventas del sector cosmético y de belleza alcanzaron los 9 billones de pesos en el 2017, sumado al hecho de que la inversión extranjera en el sector supera los US$3.500 millones. Por su parte, los medicamentos biotecnológicos representan una importante proporción de las prescripciones totales y le representan al sistema de salud billones de pesos por año.
En cuanto a mercados verdes, la venta de productos naturales tuvo un incremento del 173% en los últimos años y se espera que para 2020 crezca entre un 100% y un 500% más. Las nuevas tendencias de consumo de productos y servicios menos nocivos para el medio ambiente o derivados de su aprovechamiento sostenible, son un gran determinante del auge de los mercados verdes.
Promover un desarrollo sostenible e industrial en estos sectores y mercados es una oportunidad para la generación de empleo, uso de capital y de incrementos en la productividad a través de estrategias sostenibles.
El crecimiento verde es también la oportunidad de asumir una estrategia encaminada a la conservación del medio ambiente. En un contexto donde solo el año pasado el país perdió 219.973 hectáreas de bosques, un 23% más que en el 2016, urge un enfoque de uso sostenible de los recursos naturales.
La minería ilegal, la ganadería extensiva y los cultivos ilícitos, principales determinantes de la deforestación deben ser sustituidos por prácticas sostenibles para las comunidades de la mano del control estricto de las autoridades.
El programa del presidente electo Iván Duque propone incentivar las actividades de bioprospección e investigación de la biodiversidad. Se trata de promover el desarrollo integral de territorios en departamentos como el Chocó, Amazonas y en la Orinoquia del país, lo que permite un mayor conocimiento de nuestra biodiversidad de la mano de las conservación y protección del medio ambiente. La alternativa a los desafíos económicos y de desarrollo coinciden en una misma agenda: el crecimiento verde.