El 29 de junio de 2021 la alcaldesa Claudia López le presentó a la ciudad el trazado de la Segunda Línea de Metro que atravesaría las localidades de Chapinero, Barrios Unidos, Engativá y Suba. Sin embargo, y para sorpresa de la ciudadanía, estos planos eran distintos a los que ya como ciudad se tenían y habíamos pagado, en los últimos diez años, un poco más de 188 mil millones de pesos.

Esta nueva versión, en la cual se volvió a malgastar, a mi juicio, el erario, fue realizada por la Unión Temporal Egis-Steer por un costo adicional para la ciudad de 73 mil millones.

No obstante, el trazado que se conoció en el evento oficial, se supone, es el resultado de cinco meses de estudios realizados por los contratistas, en donde de cinco posibles alternativas la mandataria y, esperemos que los expertos, eligieron un trazado mixto que comprende una ruta que pasa por la calle 72, toma la avenida Cali al norte, pasa por encima del humedal Juan Amarillo y llega, finalmente, al Portal de Transmilenio de Suba.

Lo curioso es que dicho trazado guarda una estrecha y preocupante similitud con otro realizado tiempo atrás y a mano alzada, posiblemente por la misma Claudia y permanecía en la sala de su casa, el cual ella misma exhibió en un informe de Caracol Televisión publicado el 2 de abril de 2019 como candidata. Trazado que, se volvió a ver, en una rueda de prensa que realizó para socializar sus proyectos de movilidad tan solo 27 días después de haber asumido su cargo en 2020 y, guarda, de igual manera, casi una exacta y sospechosa similitud con el resultado de Egis-Steer.

Cabe preguntar, ¿si en tan solo 27 días la mandataria había ya logrado realizar las pruebas y estudios pertinentes para determinar que este trazado era el indicado para semejante obra o, si era más bien, la hoja de ruta impuesta que debía seguir el contratista?

Lo pregunto porque además de la obvia y preocupante improvisación por parte de la Alcaldesa, de ser cierto lo anterior, es que ella continúa mostrando un trazado que no acaba en el Portal de Suba, como se supone recomiendan los expertos, sino dos kilómetros más hacía el occidente, al sector conocido como Fontanar del Río, ubicado en la misma UPZ en donde su principal financiador de campaña, la Cooperativa Confiar, adelanta un proyecto inmobiliario y en donde los cuñados del hoy presidente electo Petro, los Alcocer, construyeron un complejo habitacional en zona de protección del Humedal la Conejera, gracias al volteo de tierras hecho por sus subalternos, entre esos, la futura ministra de Ambiente.

Ñapa: Quienes conforman la Cooperativa Confiar no solo son financiadores, sino que adelantan varios proyectos con la Constructora Codisplan, la cual es administrada por reinsertados del M-19. Junto con los Alcocer y Confiar saldrían muy beneficiados de dicha imprevista ampliación de la segunda línea. ¡Más en la próxima!