“Pegados a los celulares nos distanciamos del ejercicio de pensar y la filosofía” 

La poesía es expresión de la belleza a través de la palabra. Nunca ha sido fácil ser poeta y en este agitado tiempo pareciera fuera de lugar  dedicarse a la poesía, pero mientras haya vida en el planeta ella existirá.

He repasado la de Yirama Castaño Guiza, colombiana, nacida en Socorro, Santander,  con motivo del lanzamiento de “Cuerpos ante el olvido”, traducida al francés, voz que canta al amor, hurga las entrañas con su mano. “Me bautizaron con rostro de mujer y ungieron mis piernas con aceite”. En las recopilaciones anteriores de sus versos, “Náufragos de Luna”, 1990; “Jardín de sombras”, 1994; “El cuerpo de la otra”, 1997; y “Malabar del abismo”, 2012; se encuentra la trascendencia de la palabra, la reflexión sobre la vida, “el poema ha hurgado las entrañas con su mano”.

El estrés crece si no se lee poesía y solo damos cabida a las malas noticias. Nuestros dirigentes son antipoéticos, en el campo cultural, salvo contadas excepciones, dejan mucho que desear. Con la corrupción y el terrorismo, la falta de respeto por los derechos humanos, las desigualdades e injusticias, el alud de información dispersa en las redes sociales, falta tiempo para la poesía. Todos pegados a los celulares nos distanciamos del ejercicio de pensar y abandonamos la filosofía.   Definitivamente el eco de la melodía del universo forma parte del lenguaje, sus símbolos permanecen, tranquilizan, inspiran. Pienso en esto al repetir con Yirama Castaño: “Parece que cada quien tiene su armario en el cual cuelga su único vestido. Es el hotel de los extraños, de los que aguardan, de los tímidos, de los que no encuentran historia. Parece que todos preguntan la dirección al centro, pero temen pasar por el umbral”.

Hay poesía, aparecen nombres que no conocíamos pero que invitan a desentrañar nuevas formas del amor, de las relaciones humanas, de la muerte, que deben ser  escuchados. Se suman a la historia de nuestra poesía, a una trayectoria que no puede perderse, al concepto de                             “Si algo que no dije, te persigue, entonces, todo tendrá sentido”.

Resalto la realización del vigésimo quinto festival de poesía de Bogotá con William Ospina, como poeta homenajeado 2017. Escritor prolífico, autor de “Ursúa”,  “La serpiente sin ojos” y del “País de la canela”, que narra el descubrimiento del río Amazonas. En la Feria del Libro la poesía estuvo presente, vimos viejas y nuevas ediciones, textos en distintos idiomas, recordamos con el dramaturgo británico Dylan Thomas: “El mundo no es el mismo cuando le agregamos un buen poema”.