POR RADAMÉS BARCA | El Nuevo Siglo
Viernes, 1 de Noviembre de 2013

Enfoque preventivo

 

En momentos en que el Congreso debate el espinoso tema de la reforma a la salud, sorprende la poca atención que le está dando a un aspecto clave que debería ser primordial dentro de cualquier sistema de aseguramiento médico: el de la prevención.

No se está haciendo ningún descubrimiento al advertir que este es un flanco clave en la sostenibilidad de cualquier modelo de atención médica a la población. Se sabe desde hace mucho tiempo que si un sistema prevé mecanismos ciertos para que los afiliados sean examinados con una periodicidad, por lo menos anual, las posibilidades de detectar a tiempo cualquier tipo de patología aumentan sustancialmente. Y también es obvio que diagnosticar de manera tempranera una enfermedad o el riesgo de la misma, no sólo incrementa la posibilidad de su curación o tratamiento paliativo, lo que redunda en la calidad de vida del paciente, sino que representa un ahorro económico muy alto para las entidades encargadas del servicio médico. No es sino mirar los cuadros financieros del sector salud para establecer que las enfermedades graves, crónicas, terminales o mal llamadas “ruinosas” son las que más le cuestan al sistema y poco a poco se van volviendo un lastre muy pesado que amenaza la viabilidad económica del mismo a mediano y largo plazos.

¿Cuántas vidas se podrían salvar y cuántos recursos ahorrar si las EPS, en el caso colombiano, llamaran a todos sus afiliados a un examen anual preventivo, en los que mediante chequeos y exámenes básicos se pudiera establecer el estado de salud de cada persona, detectar sus factores de riesgo e iniciar, de inmediato y no cuando la enfermedad aflore, los tratamientos respectivos, incluyendo los cambios de hábitos que los pacientes deben aplicar para cuidar su salud?

La medicina preventiva es una tendencia que en muchos países desarrollados se ha ido abriendo camino como herramienta clave para garantizar la viabilidad financiera de cualquier sistema de salud. En Colombia, pese a que la normatividad exige que un porcentaje de los recursos se destinen a este aspecto, es muy poco lo que se trabaja en ese sentido. El enfoque del sistema es estrictamente curativo y paliativo, lo que obviamente aumenta las tasas de mortalidad y morbilidad dentro del universo de los usuarios.

El nuevo esquema de aseguramiento en salud debe enfocarse en el tema de la prevención, con metas de inversión específicas, seguimiento y evaluación periódica, así como obligaciones concretas que los usuarios puedan demandar, como derecho que es, sin desgastarse en la eterna tramitomanía.