Un nuevo año, un nuevo presidente del Directorio Nacional Conservador, Hernán Andrade. Un líder huilense que llega con propósitos de reconciliación para consolidar un nuevo país. Un presidente que debe enarbolar la bandera de la ética política para luchar contra la corrupción que tiene enferma  nuestra república.

Como buen conservador, de ancestro huilense debe cumplir con el programa político proclamado por Caro y Ospina en el año de 1849, que reconocía:

“-El orden constitucional contra la dictadura / -la legalidad contra las vías de hecho/ - la moral del cristianismo y sus doctrinas civilizadoras contra la inmoralidad y sus doctrinas corruptoras del materialismo/ - la libertad racional, en todas sus diferentes aplicaciones/ - la tolerancia real i efectiva contra el exclusivismo i la persecución/ - la propiedad contra el robo i la usurpación/ - la seguridad contra la arbitrariedad de cualquier género que sea. En consecuencia el que no acepte algo de estos artículos no es conservador.”

Nuestro ilustre senador Hernán Andrade debe llevar en su sangre la valentía de la cacica huilense, conocida como “La Gaitana” que se enfrentó al capitán Añazco, conquistador español que asesinó a su hijo. Ella  logró congregar a los indígenas para que lo capturaran, vencido fue entregado a La Gaitana, quien le hizo sacar los ojos y lo paseo de pueblo en pueblo para demostrar su venganza.

Hernán Andrade de espíritu conciliador, como buen pastor de su rebaño, ha prometido llevar el partido conservador a la victoria en las próximas elecciones legislativas y presidenciales, para ello tiene que realizar un gran esfuerzo ético, como es el de tener la valentía moral de guiar por un camino seguro a las ovejas descarriadas.

Aspirantes corruptos como el ex-procurador Ordóñez, que incineró la bandera moral de la Procuraduría con su espíritu inquisidor; que fue sancionado por el Consejo de Estado por hacerse reelegir con maniobras sucias como el de la puerta giratoria, violando la Constitución,  por su descarada homofobia, debe ser excluido de los principios conservadores. Un personaje que en su ejercicio profesional, en la institución más prestigiosa del país, le prendió una vela a Dios y otra al diablo con el rosario en la mano, no merece representar al partido conservador.

En las próximas elecciones legislativas se inscribirán miles de candidatos en toda Colombia; candidatos a concejos municipales, asambleas departamentales, Congreso Nacional, buscarán el aval conservador, que Usted debe aprobar o rechazar de acuerdo a sus principios éticos.

Presidente Andrade, en estos momentos en que los huilenses reconocen su categoría de conductor máximo, porque saben que en sus manos firmes y fieles no se abatirá la bandera conservadora, ni se comprometerá su destino, porque su presidencia estará tan profundamente arraigada en el partido que ninguna conjura podrá prevalecer contra él, los colombianos esperamos que su Presidencia sea un símbolo de garantía y de integración nacional.

Presidente Hernán Andrade: ¡Salve Usted al Partido Conservador!