El Delia presenta el clásico de Arthur Miller: “Todos eran mis hijos” | El Nuevo Siglo
UN DRAMA que se asienta con facilidad en el presente de cualquier país. /Foto: Centro Nacional de las Artes Delia Zapata Olivella
Lunes, 29 de Julio de 2024
Redacción Cultura

LOS DÍAS 2, 3 y 4 de agosto, se presentará en Sala Fanny Mikey del Delia “Todos eran mis hijos”, una obra de teatro escrita por el estadounidense Arthur Miller, ganadora del premio de la crítica dramática a la mejor obra nueva en 1947 y que convirtió al dramaturgo en la voz líder de los escenarios norteamericanos. Con esta nueva versión realizada por la Compañía de El Señor M, bajo la dirección del reconocido artista bogotano Manuel Orjuela, se pone sobre las tablas la complejidad de las relaciones personales, los conflictos éticos impulsados por la codicia y la responsabilidad de las decisiones que se toman en la vida.

La historia que allí se cuenta parte de un hecho real: entre 1941 y 1943 la fábrica estadounidense de aviones y motores Wright Aeronautical Corporation conspiró con oficiales de inspección del ejército con el fin de aprobar piezas defectuosas destinadas a uso militar. Con este caso como punto de partida, Miller dio vida a la historia de Joe Keller, un empresario que, durante la Segunda Guerra Mundial, produce piezas dañadas para aeronaves que van al combate.

Las consecuencias fatales de este acto, que parecía sepultado y sin ningún remordimiento aparente por parte de Keller, terminan por remover la tierra de un trastocado sueño americano, mientras queda expuesta la mezquindad del protagonista. Los secretos y omisiones de los personajes van desnudando, capa a capa, una realidad siniestra y destructiva, en una puesta que va tejiendo con paciencia lo trágico hasta llevar al público al clímax en medio de un perturbado orden ético.

Drama de país

“Todos eran mis hijos” trabaja sobre temas centrales a lo largo de la obra de Miller: las conflictivas relaciones entre padres e hijos, la responsabilidad social e individual, la guerra, la avaricia de la industria militar y la necesidad de vivir según unos principios. Un drama que se asienta con facilidad en el presente de cualquier país, incluyendo el colombiano y del que el público podrá sacar sus propias interpretaciones.

Tras su estreno en 1947 en Broadway en el emblemático Coronet Theatre de la ciudad de Nueva York, que estuvo bajo la dirección de Elia Kazan, esta obra ha seguido dando vueltas por el mundo. Por primera vez en Colombia se hace una adaptación que contará, además, con un elenco de lujo: las actrices Patricia Tamayo, Camila Valenzuela y Laura Rodríguez, y los actores César Mora, Jhon Alex Toro, Juan Camilo Prada y Héctor Sánchez.

Esta obra forma parte de la Temporada de Teatro Histórico Nacional del Centro Nacional de las Artes Delia Zapata Olivella, en la que también se han presentado este año, con gran acogida, obras como La Siempreviva, Edipo Rey, El médico a palos, Hécuba o la razón de la locura y, recientemente, la ópera Manuela Libertadora: amor de Manuela y Simón o sueño de un país no fundado.

Manuel Orjuela

Es un reconocido director escénico bogotano, cuyo trabajo se especializa, como él mismo dice, “en la capacidad de desarrollar intimidades sofocantes y tristes. Esto unido a una sensibilidad particular en el hecho de musicalizar en vivo grandes dramas humanos”. También ha sido actor y ha participado en grandes producciones de la televisión colombiana. En su carrera cuenta con más de 45 producciones en los últimos 20 años, desde espectáculos de gran formato hasta teatro a domicilio o que tiene lugar en su propio apartamento. Su interés por traer obras clásicas a universos contemporáneos ha derivado en la creación de puestas como ‘De ratones y de hombres’, ‘Y si Hamlet fuera ella’, ‘Te estás volviendo Chejov’, ‘Carta de una desconocida’ y ‘Segismundos’.