El Teatro Colón y el Teatro Petra, tras el exitoso estreno de Labio de liebre en 2015, vuelven a trabajar de la mano para crear Historia de una oveja, una obra escrita y dirigida por Fabio Rubiano que narra la historia del desplazamiento forzado que deben vivir tres habitantes de la Vereda del Santo José.
La puesta en escena, que se presentará del 22 al 25 de julio y el 28, 29 y 31 del mismo mes, sigue la historia de migraciones y migrantes, de gente que tiene que salir de sus hogares para empezar a vivir en otra tierra que les es ajena.
“'Historia de una oveja' nos interesa y nos sale del alma porque somos un país con el mayor número de desplazados en el mundo. A pesar de que no se dice la palabra desplazados, ni se hacen referentes de denuncia porque no es un noticiero ni un periódico, queremos dar esa visión que puede ser ambigua, como la de la oveja que ve todo positivo a pesar de lo doloroso de la situación”, expresó Fabio Rubiano, director de la obra y cofundador del Teatro Petra.
La escenografía para esta pieza será construida desde el Taller de Escenografía de la Sabana del Teatro Colón, un espacio en el que el teatro más emblemático de Colombia no solo se consolidará como un escenario de circulación de obras sino también como un lugar de producción propia.
Los personajes
Marcela Valencia, Julián Román y Juanita Cetina darán vida a los personajes de esta obra: Berenée, una oveja inocente e ingenua; Alí, el eterno migrante; y la niña Tránsito, la que guía a esta “familia” en este viaje sin rumbo. Conozca algunos detalles de este elenco de lujo:
La oveja Berenée (Marcela Valencia)
Es dulce, inocente y vive en un mundo en el que todo es color de rosa. Ella no ve desplazamientos sino paseos; no hay muertos sino muñecos; no existe el dolor sino un juego eterno. Sin embargo, pese a lo que los demás creen, esta oveja no es tan ingenua como parece.
“Los animales también son víctimas de un conflicto, lo que pasa es que normalmente no los ven. Si a una familia los desplazan o los matan, ellos quedan a su suerte. Como dramaturgo, Fabio tiene la intención con este personaje de representar la ingenuidad de un niño ante la guerra, que no puede ser la misma impresión que la de un adulto”, comentó Marcela Valencia.
El egipcio Alí (Julián Román)
La historia del eterno migrante, un hombre que salió de su tierra natal escapando de las Guerras del desierto y que está cansado de huir de la violencia. Alí llega a la Vereda del Santo José con la esperanza de poder finalizar ese ciclo macabro, no obstante, el destino tiene otros planes para él.
“Una persona que muestra el desarraigo de la tierra. Un extranjero que nos sirve para entender que el desplazamiento no es solo una cuestión local. Alí es el eterno viajante, quien realizó una extensa travesía hasta terminar en Colombia, donde vuelve a ser víctima”, contó Julián Román sobre su personaje.
La niña Tránsito (Juanita Cetina)
Aunque su nombre lo diga, ella no es una niña, solo lo parece. Se cuestiona las cosas de su entorno en una tierra en donde preguntar le puede costar la vida. Directa y sin rodeos, es la encargada de guiar al grupo en su travesía.
“Es la que empieza a reunir los sucesos que van atravesando la obra, ese rol que termina organizando y dando indicaciones de lo que se tiene que hacer en el viaje. Rompe un poco con la inocencia de la oveja, ella es la que mira a los ojos, la que pregunta de frente y la que busca más opciones. Es la irreverente frente a lo que está sucediendo y también la que motiva a sostener a este prospecto de familia”, explicó Juanita Cetina.
-El KOKEN (Derly Deira)
Una figura tradicional del teatro asiático, que se usa para ayudar a instalar la escena, organizar, limpiar y hacer labores de apoyo.
-El Muñeco (Fabio Rubiano)
Además de otros personajes, como la mandadera Felicia, la coach Maryland, San Martín de Porres, el cazador; Fabio Rubiano será el Muñeco, un personaje que permanece al lado de los tres viajeros ofreciéndoles opciones que nunca son buenas.