Por estos días, a la memoria de los colombianos vienen los recuerdos de algunas de las obras más emblemáticas de Antonio Caro, el destacado artista que falleció hace un año. Una pérdida para la industria del arte colombiano, que decide hacerle honor a su nombre a través de una propuesta de creación plástica en uno de los escenarios más importantes de Bogotá, el Museo Nacional.
“El arte necesita de la creatividad, pero la creatividad no necesita del arte”, afirmó una vez Caro. Esta postura crítica lo llevó a cuestionar las nociones convencionales de creación artística, al plantear que una propuesta creativa también puede repetirse constantemente, que ser original es también tomar prestadas imágenes y textos de la cultura ancestral, masiva y popular, y que el autor no es una persona sino la cultura en su totalidad.
Por ello “Acción plástica: homenaje a Antonio Caro”, como se titula esta propuesta del Museo Nacional que estará abierta al público hasta el 26 de junio, consiste en ofrecer un taller de creación colectiva, que se apropia de los modos de producción artística de Caro y de su crítica al arte, sus instituciones y la memoria nacional.
“La idea es que la ciudadanía viva en el Museo una experiencia creativa, una 'acción plástica' que propone hacer versiones de las versiones de Caro, para lo cual se seleccionaron algunos de sus trabajos y se resaltó un tema recurrente en su proyecto creativo: la forma como la historia nacional insiste en olvidar otros relatos y sujetos sociales”, afirmó Juliana Restrepo, directora del Museo.
La curaduría estuvo a cargo de Víctor Manuel Rodríguez, quien señala que “Antonio Caro realizó más talleres de creatividad que obras. Este homenaje reconoce este hecho, al imaginar el Museo como un gran taller de creación colectiva que inspira a los participantes a compartir las preocupaciones críticas del creador y a retomar su cuestionamiento de la institución al arte y la sintaxis del olvido que da forma al relato nacional. Al sacar a la luz las historias no oficiales, Caro nos muestra el destino trágico de la memoria de la nación: su imposibilidad de dar cuenta de la multiplicidad de sus historias y lugares”.
Caro llamaba acción plástica a sus intervenciones públicas y para esta muestra se proponen siete “acciones plásticas”: la apropiación de la firma del líder indígena Manuel Quintín Lame; la disolución de la cabeza hecha con sal nativa que recuerda a un político nacional; el homenaje a líderes estudiantiles, trabajadores e indígenas desaparecidos; la irónica apropiación de la frase del líder chino Mao Zedong; la incautación de la tipografía de una multinacional y el uso de medios e imágenes de la flora autóctona.
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Homenaje a Manuel Quintín Lame
Caro reprodujo en varias ocasiones y en distintos formatos la firma del líder indígena Manuel Quintín Lame, quien, a partir de su formación autodidacta como abogado, defendió a su comunidad de la expropiación de tierras. A menudo el artista mencionaba: “Quintín Lame es mi mejor trabajo, no tanto por mí, sino por él”. Por esa razón, se invita a los visitantes a repetir el gesto de Caro para rendirle un homenaje a su mejor obra.
Cabeza de Lleras
Antonio Caro presentó en el Salón Nacional de Artistas una cabeza hecha de sal que recordaba al expresidente de la república Carlos Lleras Restrepo. Durante la inauguración de la exposición, el artista y los participantes derramaban agua sobre la cabeza, la cual se diluyó y, al filtrarse el líquido, el Museo Nacional se inundó con agua salada. Por ello, los participantes contarán con recipientes para repetir esta acción.
“Aquí no cabe el arte”
En 16 cartulinas, Caro escribe esta frase y la acompaña con los nombres de desaparecidos, entre los que se cuentan líderes estudiantiles, sindicales e indígenas en el marco de las persecuciones políticas de su época. Los participantes podrán escribir los nombres de aquellas personas que consideren que se ajustan a este contexto.
“El imperialismo es un tigre de papel”
Caro reprodujo esta frase de Mao Zedong en una cinta roja con letras que recordaban los caracteres de la lengua rusa. La frase fue acompañada con siluetas de tigres elaboradas en cartulina y colgadas del techo en el Museo de Arte Moderno de Bogotá en 1972. Las personas tendrán a su disposición siluetas de tigre que, una vez intervenidas, se colgarán del techo como lo hizo Antonio Caro.
Colombia Coca-Cola
Caro encuentra que las palabras Colombia y Coca-Cola tienen el mismo número de letras. El creador decide apropiarse de la tipografía del refresco y la pinta con esmalte sobre metal. Este es quizás el proyecto más conocido de Caro, el cual incluso se reproduce en camisetas, individuales, delantales, entre otros objetos. Para muchos, es un llamado de atención sobre la condición colonial y subordinada de nuestro país. La exhibición cuenta con una estación para que las personas impriman sobre un soporte de tela el diseño realizado por Caro.
Maíz
Es un símbolo que, para Caro, representa a los pueblos originarios en su conjunto y que se volvió una imagen reproducida en múltiples trabajos, como pieza principal o como parte de otras piezas. La sala dispone de un zócalo que repite el diseño del maíz para que los visitantes puedan hacer un sembrado.
Defienda su talento
Fue una acción plástica en la que Caro le dio una cachetada a un crítico de arte que no tuvo en cuenta su trabajo. Posteriormente, esta acción se convirtió en un dibujo sobre la pared con el cual se recordaba esta situación y se hacía una crítica a las instituciones artísticas.
La “Acción plástica: homenaje a Antonio Caro” contará también con la proyección del documental “HOLA 21”, un proyecto de Antonio Caro. Se trata de cinco conversaciones en torno a cinco publicaciones que formarán parte de la programación audiovisual de Artbo Fin de Semana, los días 22 de abril a las 5:00 p.m. y a las 6:00 p.m., el 23 de abril a las 6:00 p.m. y el 24 de abril a las 5:00 p.m.