El internacional colombiano James Rodríguez reculó de su pedido de salida y seguirá en el Sao Paulo, donde no ha podido brillar en medio de reiterados problemas físicos, dijo este martes un alto directivo del club brasileño.
"Él pidió disculpas, quiere jugar en Sao Paulo. Como nunca se apartó de los entrenamientos, siempre cumplió con sus obligaciones, entrenando bien, al 100%, sin tener problemas con nadie (...) entendimos el pedido de disculpas", dijo el coordinador técnico Muricy Ramalho en una entrevista a un medio local.
"No podemos dejar de lado a un crack de estos. Él habló con el entrenador, pidió perdón y lo entendimos", agregó el legendario extécnico saopaulino, poniendo punto final a una de las novelas que ambientaban desde hace semanas el comienzo de temporada del fútbol de Brasil.
Rodríguez, de 32 años, se disculpó por no haber acompañado al plantel a disputar la Supercopa de Brasil que le ganaron al Palmeiras en penales el 4 de febrero en Belo Horizonte, según Ramalho.
El cafetero no estaba en la lista de convocados debido a inconvenientes físicos, que lo han privado de jugar este año, según el elenco, pero otros atletas lesionados sí viajaron.
Los medios locales aseguran, además, que su salida no pudo concretarse porque no llegó a un acuerdo financiero con Sao Paulo para rescindir su contrato, válido hasta el 30 de junio de 2025.
Sin hacer mención explícita a su continuidad, el mediocampista publicó este martes en Instagram tres fotografías suyas en un entrenamiento del Tricolor, acompañadas del mensaje "algo bueno está llegando".
El zurdo pidió su partida antes del choque con Palmeiras, según fuentes del club, que aseguraron entonces que el jugador tenía problemas para adaptarse al fútbol físico de Brasil y sufría de "molestias crónicas" en la pantorrilla.
"Como no está jugando, no está satisfecho", dijo entonces el director de fútbol Carlos Belmonte.
Considerado uno de los mejores futbolistas colombianos de la historia, Rodríguez ha tenido problemas para consolidarse en sus últimos equipos en medio de problemas físicos y supuestos inconvenientes con sus entrenadores, que él niega.
A Sao Paulo llegó en julio después de haber estado tres meses sin equipo, tras su salida del Olympiacos de Grecia, y 13 años actuando fuera de Sudamérica.
Aunque fue recibido como estrella por la 'torcida', el entusiasmo alrededor del ex Real Madrid (2014-17, 2019-20) y ex Bayern Múnich (2017-19) fue decayendo con el pasar de los partidos en medio de ausencias por lesiones o decisiones técnicas.
Por momentos mostró la magia de su zurda, que se hizo famosa al consagrarse goleador del Mundial de Brasil-2014, con seis anotaciones, pero no se ha podido consolidar en la titular y apenas ha jugado 14 encuentros (un gol, tres asistencias) en siete meses.