Con la ilusión de llevar sus vitrinas un nuevo trofeo y alcanzar el codiciado cupo a la Copa Libertadores del próximo año, Nacional y Once Caldas chocan esta noche en el gramado del Atanasio Girardot, en una final abierta.
El duelo de ida, en Manizales, concluyó con empate 2-2, por lo que todo está por definirse hoy, entre un equipo con muchos altibajos, como el Verdolaga, y otro parejo, como el Blanco Blanco.
Sin mostrar su mejor versión, Nacional logró llevarse del Palogrande un resultado bueno que no lo deja como favorito, pero le permite manejar con más tranquilidad las cosas pues tiene la localía como herramienta de defensa. Ahora, los antioqueños han perdido las últimas dos finales que disputaron este año. En febrero se les escapó el título de la Superliga ante Millonarios y en junio sufrieron una dolorosa derrota con el Deportes Tolima por el Torneo Apertura.
Con doblete de Aldo Leao Ramírez, los antioqueños tomaron confianza y realizaron un gran encuentro de ida. Pensando en la vuelta, Hernán Darío Herrera decidió rotar la nómina en Liga y arriesgó su cupo a los ocho. En la ida salió expulsado Helibelton Palacios, lateral derecho de los verdes que fue convocado a dos fechas FIFA con la Selección Colombia
Entre tanto, en la última jornada de Liga Águila, Once Caldas recibió a Nacional y lo derrotó 2-0, asegurando su presencia en la siguiente ronda del campeonato. Con este resultado los paisas deben sumar al menos cuatro puntos de los seis que quedan para entrar con calma a los playoff, pero cuentan con una ventaja sobre los demás y es que dependen de sí mismos y no de otros marcadores.
Pese a lograr un valioso empate en Manizales la presión para los paisas es alta pues en caso de no alcanzar el campeonato este año el equipo podría irse en blanco tras una poderosa inversión de la directiva. Es cierto que este título traería un poco de calma para el cuerpo técnico, pero no sería la salvación de la campaña pues aún está en juego la clasificación a los cuadrangulares.
Por otra parte, para los manizalitas anotó en dos oportunidades Ricardo Ster, que se está transformando en una pieza clave para el conjunto dirigido por Hubert Boderth. El entrenador conformó un equipo que es sólido y organiza un juego vertical muy peligroso que le valió para dejar atrás a un rival complicado como lo fue Millonarios.
Jugadores de experiencia como Juan Pablo Nieto, Diego Arias y José Fernando Cuadrado complementan una plantilla integrada por muchos juveniles, que están siendo potenciados por el cuerpo técnico cuando la nómina es bastante corta. Es importante alcanzar esta Copa porque los premios serían un plus que ayudaría a la directiva a sobrellevar la difícil situación económica que vive.
El contraste que presenta esta final es adverso pues mientras para el Once Caldas es un logro haber llegado a esta instancia, para Nacional sería un fracaso no alzar el trofeo. Asimismo, los manizalitas buscarán a toda costa el cupo a la Libertadores porque quieren regresar a una competencia internacional luego de mucho tiempo sin siquiera entrar a los ocho.
Nacional tendrá que arriesgar, mientras que los visitantes pueden salir a hacer ese fútbol alegre, de tenencia de balón que los caracteriza.