“Lo hiciste bien, felicitaciones, lo logramos”, esas fueron las primeras palabras que el entrenador vallecaucano, Alejandro Caro, le dijo a Queen Villegas al clasificarse para la primera final olímpica de Colombia en BMX Freestyle en París 2024. Fue contundente, directo y asertivo, pues con aquella frase resumió una participación para el recuerdo y para una vida de esfuerzo, persistencia y dedicación compartida.
Villegas nació en Buga, el 6 de junio de 2003, junto con su más fiel compañera para afrontar las batallas deportivas y de la vida. Con su gemela, Lizsurley, tiene una relación que trasciende más allá de su parecido físico, es una conexión que les permite complementarse, acompañarse y persistir por un sueño que, hasta cierto punto, se hizo realidad.
Sus padres, Uberley Villegas y Mary Luz Serna, fueron las principales figuras para asentar los valores y principios en dos vidas que apuntaban tan alto como los saltos en su disciplina. Desde pequeñas atestiguaron como su mamá cocinaba casi cualquier dulce tradicional del valle del cauca, como el manjar blanco y los cortados, hasta como su papá se las ingeniaba para venderlos.
Aquel ejemplo de perseverancia y resiliencia diaria estableció en lo más profundo de las dos gemelas una semilla que pronto germinaría en un deporte que, por casualidad, conocerían. Intrínseco a ellas estaba presente la energía, las ganas de realizar y conocer cosas nuevas, inicialmente, sus padres comenzaron por una actividad que les llamó la atención, el canto. Sin embargo, la vocación duró un par de clases y ante la situación el siguiente paso fue el baile.
Fueron las ganas por querer aprender a bailar que, en el momento menos esperado, comenzaron a realizar un recorrido que les cambiaría la vida. En el trayecto hacia la academia de baile, las gemelas se percataron del inicio de una construcción, un parque al que, una vez quedó listo para usar, comenzaron a asistir. En ese espacio nació el amor, a primera vista, de un deporte no muy conocido, pero que en ese momento brillaba gracias a una antioqueña que se convirtió en reina.
Mariana Pajón, quién por aquellos años ya era campeona olímpica tanto en Londres 2012 como en Río 2016, fue una gran inspiración para las hermanas Villegas, al principio practicaron el BMX Racing y el Dirt Jump, pero con el tiempo, comprendieron que su trayecto no iba por ahí, sino por aquel donde los trucos brillaban y los bicicrosistas volaban, hasta alcanzar el cielo, en un circuito que no era de carreras.
Desde los 13 años, el parque El Vergel fue el espacio destinado para los inicios de un sueño compartido, para perder el miedo ante lo desconocido y para ganar la confianza ante las constantes caídas. El BMX Freestyle las cautivó desde el primer momento, en una disciplina que solo practicaban niños, aparecieron dos gemelas intrépidas, persistentes y, por supuesto, con la actitud necesaria para afrontar tanto lo bueno como lo malo.
Sus potenciales no tardaron mucho en hacerlas destacar, pero la habilidad no brilla sin el trabajo, por lo que la disciplina compartida marcó la diferencia frente a quienes también practicaban el deporte. Intentarlo una, otra y otra vez, siempre que un nuevo truco llegaba al conocimiento de las jóvenes Villegas, gracias a los tutoriales en YouTube, implicaba horas de constantes oportunidades para aprenderlos. La persistencia de las hermanas demostraba que no era un simple hobby, el BMX Freestyle era la base para una nueva vida.
A sus 21 años, Queen Saray Villegas Serna le demostró a todo un país que no existen peros suficientes para luchar, todo lo necesario, por las metas que se proponen. Con gran habilidad para volar y deslumbrar junto con la persistencia para crecer, su historia seguirá apuntando al cielo, a los podios del BMX Freestyle y, sobre todo, a la admiración y al agradecimiento de los valores y principios que su familia tanto le inculcó.
Villegas realizó una rutina de 64.80 y otra de 88.00, en el BMX Freestyle, que le adjudicaron el cuarto lugar, siendo la mejor del continente suramericano y consiguiendo el primer diploma olímpico, para nuestro país, en los Juegos Olímpicos de París 2024 durante la mañana de ayer en la Plaza La Concorde 2.