Gracias a la lenta pero sostenida reactivación de la economía, el Producto Interno Bruto del país habría alcanzado el -0,4%. Así lo están planteando distintos analistas.
Esto surge de datos privados como el último Indicador del Seguimiento a la Economía (ISE) del Bancolombia, en el que la actividad económica, exhibió en febrero una tasa de contracción anual menos profunda que la observada el mes previo.
“En efecto, y en línea con nuestra expectativa, este indicador retrocedió a una tasa anual de -3,48%, retomando la senda de recuperación como consecuencia de la relajación de las restricciones de movilidad en las principales ciudades del país que se tradujo en una mejor dinámica de la actividad productiva”, señala el informe sobre el indicador.
En ese análisis, se explica que “a este resultado se le sumó la revisión al alza en 0,3 puntos porcentuales de los resultados del índice para enero, evidenciando el buen inicio de la economía local en el presente año. En esta oportunidad, mientras las actividades secundarias y terciarias mostraron señales de aceleración en su ritmo de actividad respecto a enero, las primarias prolongaron su deterioro gracias al efecto base de un febrero 2020 destacable”.
Efectivamente durante este periodo, la industria y la construcción pasaron de una contracción de -9,8% en enero a -7,3%, por cuenta de una leve recuperación del sector constructor y un destacable momento de la industria.
Sectores
Por su parte, la agricultura y la minería mostraron una caída en su variación anual al pasar de -7,8% a -8,5%. Finalmente, entre los sectores que componen las actividades terciarias, las actividades financieras, inmobiliarias y de comunicaciones siguen marcando la pauta, mientras que el transporte, alojamiento y actividades profesionales continúan su lenta recuperación de su capacidad productiva”.
Sostienen los analistas del Bancolombia, que “para marzo, basándonos en nuestro indicador Nowcast Bancolombia, esperamos que la prolongación relajación de las medidas de en este mes y el efecto de una baja base de comparación, hayan influido de manera positiva sobre la actividad productiva del país. Específicamente, estimamos que para el primer trimestre del año la economía nacional haya presentado una leve contracción de -0,4%”.
Al mismo tiempo y respecto al panorama anual, la economista jefe para Colombia de BBVA Research, Juana Téllez, señala que “la economía colombiana tendrá un mejor cierre en 2021 gracias a la recuperación económica de Estados Unidos y a los buenos precios del petróleo. Según los cálculos de BBVA Research, se espera un crecimiento del PIB de 5,5% para 2021 y 4,8% para 2022, alcanzando a finales de este año el nivel de producción prepandemia. Esta previsión es más optimista que la presentada en enero cuando el crecimiento para el año en curso se ubicaba en 4,8% y en 3,8% el de 2022”.
Efectos
Sostiene la analista que “Estados Unidos representa cerca del 30% de las exportaciones y de la Inversión Extranjera Directa (IED) del país y es el principal emisor de remesas. Estas últimas impulsan el consumo privado, si a esto se suma que estimamos que en 2021 el precio del petróleo sea 55% superior al promedio registrado en 2020, nos llevan a plantear un escenario más optimista del crecimiento del PIB de 2021 a 5,5%”.
Indica que en lo que corresponde a los componentes del PIB, el consumo de los hogares que ha tenido una recuperación desde el cuarto trimestre del año pasado y la inversión en maquinaria para la construcción de vivienda liderarán el crecimiento en 2021. Cabe resaltar que la construcción de vivienda sigue siendo uno de los sectores con mejores proyecciones para este año ayudado por los subsidios del Gobierno Nacional que incentivan la compra.
De esta manera, según estimaciones de BBVA Research, la mejor demanda privada y el gasto público compensarán el efecto negativo de los confinamientos y la reforma fiscal. Así, en 2021, el consumo de los hogares, especialmente en bienes, la inversión en maquinaria y equipo, y la construcción de vivienda lideran la recuperación, mientras que en 2022, el sector que jalonará el crecimiento económico será la inversión en todos sus componentes y las exportaciones, mientras que en el consumo de los hogares habrá una sustitución hacia los servicios.